Hace algo menos de un siglo, la sociedad estaba de espaldas a todo lo pretérito y el eslabón que debería habernos unido a un pasado rico y diverso estaba roto. Rotas también las amarras del barco que iba a transportarnos al futuro, iniciado ya el viaje al progreso y todas las miradas puestas en una tierra que prometía no defraudar. Entonces casi nadie identificaba las «cosas de viejos» con el patrimonio y mucho menos se atrevía a denominar «inmaterial» a todo aquello no tangible que provenía de épocas remotas pero que, aunque fuese a trancas y barrancas, estaba aún presente en nuestra manera de ser y expresarnos. Más de una vez percibimos en escritos de Delibes su desazón cuando se denominaba «cultura tradicional» a lo que, según su criterio, era simplemente cultura, sin adjetivos de ninguna clase.
Durante los últimos cien años muchos investigadores han dedicado todo su esfuerzo a valorar y hacer valorar lo patrimonial, comprobando que –pese a ser lo inmaterial un tesoro al que la oralidad suele conferir las características más destacadas– el patrimonio es uno, y no puede separarse lo intangible de aquello que es objeto de su descripción. Los griegos llamaban idea a la apariencia de las cosas, es decir a la percepción particular que podían tener de los objetos, cuya sensación encerraban en un campo mental al que después recurrían cada vez que necesitaban relacionarlo con otras representaciones de esos mismos objetos. La idea de una silla, por ejemplo, se formaba en su mente al pensar en un objeto funcional sobre el que podían sentarse y al que podían sacar algún partido, pero no tenía que ver con la imagen concreta de una silla sino que se manifestaba de forma abstracta. La silla existía –o coexistía, como diría el filósofo y escritor Gustavo Bueno– desde el momento en que la pensaban: idea equivalía a pensamiento e imagen a representación, aunque muchas veces se confundieran o se usaran indistintamente ambos conceptos.
Del mismo modo, lo inmaterial no se podría explicar sin la existencia de lo material, así que las palabras con que nos expresamos definirán con más o menos exactitud los objetos a que se refieren. La memoria ayuda al campanero a recordar los toques con que trasmitirá a sus vecinos los acontecimientos del día, del mes o del año. Pero necesita la cuerda, el badajo y el vaso de la campana para que ésta se mueva y transmita los sones que se expresan en un lenguaje peculiar y familiar. Sin la memoria que coordina recuerdos y acciones, sin las cancioncillas con que se ayuda a repicar, sin los movimientos precisos de sus muñecas que sujetan las sogas, sin la técnica de los antiguos fundidores y los metales que se mezclan para obtener un sonido limpio, sin los toques que hablan la lengua común, no existiría lo inmaterial y lo material estaría plagado de carencias.
Estamos atados a nuestra historia. Unidos a la sangre de quienes nos precedieron y nos transmitieron las costumbres, la forma de comportarnos, el alma de las cosas. Todo eso se nos entregó para que cuidásemos de ello y no para despreciarlo o dilapidarlo. Palabras, sentimientos, conocimientos útiles y prácticos.
Los conocimientos a los que denominamos inmateriales, pues, son expresiones verbales (relatos, canciones, refranes, oraciones, dichos, comparaciones, etc.), complementarias de una cultura almacenada por el individuo a lo largo de períodos de tiempo dilatados; esa complementariedad viene dada precisamente por la posibilidad de que tales expresiones le ayuden a comprender mejor o contextualizar aquellos conocimientos que son la base de la mentalidad. Cuando esa mentalidad le caracteriza frente a otros, le confiere además una identidad. Hay un tipo de identidad «natural», procedente de la acumulación de valores éticos y estéticos, que se va formando en una comunidad a lo largo de su historia, y hay otra especie en la que, con todas esas cualidades, se construye un modelo de comportamiento colectivo, algo así como un espejo en el que nos reconocemos y nos reconocen los demás. Durante siglos, la enseñanza de ese comportamiento se hacía a través de fórmulas atractivas, convincentes, que envolvían a quien las escuchaba y le seducían sin remisión por serle tan familiares como el rostro del ser amado o el paisaje.
Ese ejercicio de responsabilidad –aunque se haga de forma personal– se hace cada día más necesario pues la tendencia social acomoda al individuo en posiciones claramente pasivas que le alejan de sus compromisos como ciudadano e incluso como ser humano y le apartan de una actividad para la que todos estamos legitimados, siempre que conozcamos en la medida de lo posible, naturalmente, esos asuntos patrimoniales, lo cual implicará un interés por ellos así como un estudio y valoración de todos sus extremos. Hay que buscar una alternativa a la pasividad que ataje el progreso de la trivialidad y la aceptación de lo vulgar como medida de todo. Como escribía Fernando Pessoa, «en la vida de hoy, el mundo sólo pertenece a los estúpidos, a los insensibles y a los agitados».
La reflexión del gran poeta y pensador portugués, escrita hace más de un siglo, no ha dejado de tener actualidad. Las crisis más dañinas son las crisis del espíritu y de la sensibilidad. Recobremos, en estos tiempos en que parece que el mismo tejido social está en cuestión, en que se desmoronan los mundos artificiales de una economía sobrevalorada, la capacidad de observación para volver a descubrir un patrimonio que debe seguir perteneciendo a todos.
Museo de La Casona
1.931 visitas
Total general: 493.391 visitas
Visitas a la página web
(27 de marzo de 2023 > 27 de junio de 2023)
196.383 páginas vistas desde 131 países
Total general desde junio 2006: 17.528.098 visitas
El grueso de visitantes a nuestra página web procede de España (43.970 usuarios), México (6.620 usuarios), Argentina (3.173 usuarios) o Colombia (2.012 usuarios). Pero también hay visitas desde países no hispanohablantes como Francia (500 usuarios), Alemania (382 usuarios), China (293 usuarios), Italia (250) e, incluso, 124 usuarios desde Finlandia.
La iniciativa de realizar un ciclo de conferencias sobre diversos aspectos del «Acervo común» trajo a Urueña durante el primer semestre del año a varios ponentes bien conocidos:
Urueña 3 y 4 JUN 2023. Heredad de Urueña
Organiza: Fundación Joaquín Díaz
Sede del simposio y colabora:
Bodega Heredad de Urueña
Día 3 de junio
11:00 horas • Rafael Marijuán:
Una escuela castellana de construcción de claves
12:30 horas • Joan Josep Gutiérrez:
Muzio Clementi y el pianoforte
16:30 horas • Antonio Baciero, José Ignacio Palacios, Berchtold Soergel y Ana Caramanzana. Modera Luis Delgado:
Mesa Redonda: El intérprete ante el teclado
20:00 horas • Miriam Gómez-Morán:
CONCIERTO
Lugar, Fundación Joaquín Díaz, Urueña.
Piano John Broadwood, London, 1832. Colección “Serrato”. Instrumento construido por John Broadwood en 1832 en Londres.
Día 4 de junio
11:00 horas • Visitas al Museo de la Música y al Museo de la Fundación
20:00 horas • Nano Stern (nyckelharpa) y Jon Wasserman:
CONCIERTO
Lugar, Bodega Heredad de Urueña.
21 de junio de 2023. Cátedra Casado Soto
En el tamaño de papel que hoy llamaríamos A3, sin doblar y con impresión por una sola cara, la aleluya fue siempre una forma eficaz de transmitir conocimientos. Basándose en la acendrada tradición de la Iglesia de adoctrinar y catequizar a los iletrados con la ayuda de grandes cartelones –o de retablos- cuyas imágenes podían transmitir ideas y hechos, se fue creando un tipo concreto de papel, sobre el que se imprimían dibujos de trazo sencillo –generalmente encuadrados en viñetas para fijar mejor su contenido-, debajo de los cuales se añadía un breve texto en verso o prosa que aclaraba o resaltaba la figura.
Miércoles 26 de abril de 2023. Sala Francisco de Cossío (Casa Revilla) de Valladolid
Con motivo de la exposición «TAHONA “Amasando la tradición” – 50 años del folk en Valladolid», comenzó el ciclo de conferencias el miércoles 26 de abril en la sala Francisco de Cossío (Casa Revilla) de Valladolid, a las 19:30 horas. JOAQUÍN DIAZ habló de «La evolución de la música popular».
Tercer sábado de cada mes, 2023. Centro e-LEA Urueña
Desde la Fundación Joaquín Díaz, la Cátedra de Estudios sobre la Tradición –de la Universidad de Valladolid (en colaboración con la Universidad Millán Santos)– pretende ofrecer a un público interesado y diverso algunos aspectos o temas poco difundidos del patrimonio cultural. Las conferencias, encuadradas dentro de un ciclo anual titulado «El acervo común», tendrán lugar a las 11 horas en el centro e-Lea «Miguel Delibes» de Urueña y habrá posibilidad de desplazarse hasta la Villa gracias a un autobús que pondrá Diputación de Valladolid a disposición de quienes deseen asistir.
Enero 21 • 11:00h
Santiago Bayón: Las vías pecuarias
Febrero 18 • 11:00h
Luciano López Gutiérrez: El habla rural de Delibes
Marzo 18 • 11:00h
Juan Francisco Blanco: Nuestras brujas y sus poderes
Abril 22 • 11:00h
Luis Vicente Elías: El vino de la infancia a la vejez
Mayo 20 • 11:00h
Fernando Manero: Territorio y memoria. La preservación de los paisajes
Junio 17 • 11:00h
Germán Delibes: La subsistencia en la prehistoria
Julio 21 (viernes) • 19:30h
Begoña Olavide y Carlos Paniagua: Salterios medievales
Octubre 21 • 11:00h
Carlos Piñel: Tatuajes y símbolos
Noviembre 18 • 11:00h
Carlos del Peso: La entrada del moro y otras danzas
Diciembre 16 • 11:00h
José Luis Alonso Ponga: Representaciones de Navidad
13 de junio de 2023. Noticias de Castilla y León
«Joaquín Díaz, el imparable músico y folclorista con una trayectoria que huye de las modas»
Por Paula Apastegui. 13 junio, 2023
A sus 76 años, el zamorano continúa centrando sus esfuerzos en potenciar y difundir la cultura tradicional a través de la música, la interpretación, los libros y las conferencias, una labor que lleva desempeñando más de medio siglo.
29 de marzo al 28 de mayo de 2023. Casa Revilla. Valladolid
Con motivo de la exposición «TAHONA “Amasando la tradición” – 50 años del folk en Valladolid», comenzó el ciclo de conferencias el miércoles 26 de abril en la sala Francisco de Cossío (Casa Revilla) de Valladolid, a las 19:30 horas. JOAQUÍN DIAZ habló de «La evolución de la música popular».
27 de junio de 2023. Círculo de Recreo de Valladolid
Este trabajo es un homenaje al colectivo de trovadores y juglares y los diferentes movimientos de la canción que surgieron a partir de los años sesenta por todas las regiones y pueblos de Sefarad. Sus canciones fueron un medio para lanzar mensajes de Esperanza, Justicia, Paz y Libertad además de revindicar las raíces culturales en las distintas lenguas de los pueblos de España y Portugal.
14 mayo de 2023 Urueña. 16 de mayo Valladolid
El día 14 de mayo en el Centro e-lea Miguel Delibes de Urueña se presentó el libro «Asturias en el corazón», conteniendo el DVD del concierto que se celebró hace un año en el teatro Filarmónica de Oviedo con la intervención de numerosos artistas. En la presentación estuviron Luis Delgado, Concha Fernández Pol (promotora del concierto) y Joaquín Díaz.
El día 16 de mayo José Ramón Pardo (editor del libro, con dos cds y un DVD) y Joaquín Díaz, lo presentaron en el Círculo de Recreo de Valladolid.
5 de mayo de 2023. Auditorio de la Biblioteca de Castilla y León. Valladolid
12 de mayo de 2023. Círculo de Recreo de Valladolid
El viernes 12 de mayo, en el Círculo de Recreo de Valladolid, Carlos Núñez y Joaquín Díaz mantuvieron una charla sobre música, acercándose a temas muy actuales como la música de raíz, la música celta, la música de ida y vuelta a América o el estado de los trabajos de campo en España.
10 de mayo de 2023. Tres Cantos (Madrid)
El miércoles 10 de mayo de 2023 el Grupo Literario Encuentros organizó en la feria del libro de Tres Cantos el evento «Folklore», contando con Joaquín Díaz como invitado especial.
Donación de los mozos del año de Tabanera del Monte (Segovia)
Palo de paloteo fabricado por Lorenzo del Pozo, de la localidad de Abades (Segovia), en madera de encina para ser utilizado en la danza de Tabanera del Monte, de 2022. La danza de Tabanera es ejecutada por ocho mozos el día de San Juan Bautista a lo largo de las calles y recorrido de la procesión y mantiene muchos de los ancestrales elementos de tradición que han sido estudiados por Fuencisla Alvarez, como el fino engalanamiento de las calles con cantueso, la presencia exclusiva de mozos solteros para la danza y la constancia desde hace cinco siglos de estas y otras costumbres: la revolada, el pasacalles de autoridades, la enramada del arco, el volteo festivos de campanas y los cohetes, la mayordomía o los gozos que se cantan al santo en la iglesia. Se mantienen en la danza al son de la dulzaina siete paloteos con algunos textos que aparecen documentados desde el Siglo de Oro y hasta los siglos XIX y XX. El palo fue entregado por Adrián de la Rubia en representación de los mozos que mantienen la danza en los últimos años a Carlos Porro para que se conservara en la Fundación Joaquín Díaz.
Donación de la Asociación de Amigos de la Fundación Joaquín Díaz
Se ha recibido como donación de la Asociación de Amigos de la Fundación, los 18 volúmenes de la Enciclopedia de Diderot y D´Alambert, editada en 1751. Franco María Ricci hizo esta preciosa reedición en 1970 con una tirada limitada a 3.000 ejemplares.