Todavía existen en España algunos lagos y lavajos que reciben la denominación de laguna de mor o de moro o de los moros. León (en Santa Cristina del Páramo), Sevilla (en Cabezas de San Juan), Toledo (en los Alares), Cáceres (en Zarza la Mayor) y Valladolid (en Urueña), podrían servir de ejemplo. La raíz mor, que seguramente dio origen a la expresión, significa, en algunas lenguas anteriores a la latina, lugar oscuro o lugar salvaje, de donde muchos filólogos han hecho derivar la confusión de moro con mor, ya que moro, en las lenguas romances, se aplicaba a la persona de tez oscura y, por extensión, al hombre primitivo que venía de lugares no cultivados. Esa asimilación de mor a lo sombrío o a lo inculto (y por tanto a lo peligroso), hizo que muchos de sus derivados incluyendo los términos amauros y maurus del griego y del latín- designasen conceptos que fluctuaban entre la oscuridad y la confusión, terminando por mezclar a todo ello enfermedades del cuerpo y del alma, como las contraídas en los lugares pantanosos o las que provenían de alguna insania mental.
Colecciones de la casona
septiembre 2000 - diciembre 2000: 2.875 visitas
Total general: 123.722 visitas
Colección de campanas
septiembre 2000 - diciembre 2000: 2.748 visitas
Total anual: 11.328 visitas
Total general: 56.832 visitas
Aula arqueológica "Mercedes Rueda"
septiembre 2000 - diciembre 2000: 1.329 visitas
Total anual: 6.148 visitas
Total general: 20.325 visitas
-La colección de campanas Quintana ha sido trasladada a la Sala de Exposiciones de la Fundación, anexa al edificio central, con lo que se agrupan definitivamente las dos coleciones permanentes de instrumentos musicales. La colección se ha complementado con 20 fotografías en color, grabados antiguos y unos moldes con letras de fundición cedidos por Iris Lázaro.
-Asimismo, y tras su aprobación por la Junta de Patronos y la familia Rueda, se acordó convertir el Aula de Arqueología en "Sala de Exposiciones Mercedes Rueda", renovando el espacio expositivo donde se mostrarán temporalmente colecciones de índole etnográfica a partir del mes de marzo.
-La Junta de Patronos acordó también, en su reunión de diciembre del año 2000, incorporar como nuevo miembro del Patronato al Ministerio de Educación, Cultura y Deportes. De este modo, se propician colaboraciones a nivel nacional y se avala la proyección internacional de la Fundación desde instancias estatales.
-La Fundación envió a mediados de diciembre del año 2000 al Svenska Akademiens Nobelkommitté, la petición del Nobel de Literatura para Miguel Delibes, uno de los mejores escritores españoles del siglo XX y miembro del Consejo Asesor de la Fundación.
-Con texto de Salvador García Castañeda y dibujos de Santiago Bellido se ha editado un pliego titulado "Aleluyas de Urueña".
-Joaquín Díaz recibió en diciembre el Premio Norte de Castilla de Cultura y fue nombrado Académico Correspondiente de la Real Academia de San Fernando. En el mes de marzo aparecerán sus últimos trabajos: un disco de música sefardita titulado "El alma es dulse" y unas conversaciones con Joaquín Alvarez Barrientos, del CSIC, tituladas Las palabras del músico, que editará Ambito ediciones.
-Modesto Martín Cebrián cedió a la Fundación una colección de 63 carteles catequéticos de comienzos del siglo XX que serán el tema de la primera exposición que se hará en la Sala Mercedes Rueda a partir del mes de marzo.
-Se adquirieron una bandurria del siglo XIX de la casa Salvador Ibáñez, un laúd de Telesforo Julve, una guitarra Ramírez, una cítara, un gramófono Decca portátil y una campana de torno de convento.
Todavía existen en España algunos lagos y lavajos que reciben la denominación de laguna de mor o del moro o de los moros. León (en Santa Cristina del Páramo), Sevilla (en Cabezas de San Juan), Toledo (en Los Alares), Cáceres (en Zarza la Mayor) y Valladolid (en Urueña), podrían servir de ejemplo. La raíz mor, que seguramente dio origen a la expresión, significa, en algunas lenguas anteriores a la latina, "lugar oscuro" o "lugar salvaje", de donde muchos filólogos han hecho derivar la confusión de moro con mor, ya que moro, en las lenguas romances, se aplicaba a la persona de tez oscura y, por extensión, al hombre primitivo que venía de lugares no cultivados. Esa asimilación de mor a lo sombrío o a lo inculto (y por tanto a lo peligroso), hizo que muchos de sus derivados -incluyendo los términos amauros y maurus del griego y del latín- designasen conceptos que fluctuaban entre la oscuridad y la confusión, terminando por mezclar a todo ello enfermedades del cuerpo y del alma, como las contraídas en los lugares pantanosos o las que provenían de alguna insania mental.