Giulio Cesare Croce (1550-1609) es quizá el narrador oral más famoso de la Italia barroca. En 1606 aparecen impresas sus Sotilissime astutie di Bertoldo, relato que se basa en parte en el Dialogus Salomonis et Marconphi y en parte en otros relatos populares medievales que ambientan la acción en la corte del rey Alboino; así, por ejemplo, el engaño al alguacil ya aparece en el Unibos, relato que se contaba por toda Europa allá por el siglo X. A esta obra sigue Le piacevoli et ridicolose simplicità di Bertoldino (1608) que narra las historias de su hijo. Años más tarde aparece la Novella di Cacasenno figlio del semplice Bertoldino (1620), obra de Adriano Banchieri. Hoy días las tres obras se publican juntas con el título de Bertoldo, Bertoldino y Cacasseno.