Músicos de diferentes edades componen esta banda, seguramente fluctuante entre los clásicos pasodobles bailables y el jazz. Muchos grupos surgieron en la Ribera del Duero en los años 20 del siglo pasado al abrigo de las melodías foráneas que transmitía el gramófono con exótica seducción. No sabemos si quien está a los pies de los artistas es un amigo que se ha tumbado a la sombra o el ideal de vocalista, pero quienes forman el grupo están con sus armas en la mano -saxofones, trompeta, baquetas de batería, trombón de varas o sacabuche- y esperan pacientemente la hora del baile que se prolongará mientras queden parejas vivas.
Del archivo Ceballos.