28 y 29 de junio de 2024. VI SIMPOSIO ACADEMIA DE MÚSICA ANTIGUA

Día 28 de junio
11:00 horas • Cristina Bordas:
Antiguos pianos festivos
12:30 horas • Raquel Jiménez Pasalodos:
Los labrosones del mundo antiguo: poder y diseño acústico en la prehistoria y la antigüedad
17:00 horas • Visita al museo de la Fundación Joaquín Díaz
20:00 horas • Abraham Cupeiro: Concierto «Resonando en el pasado»
Resonando en el Pasado es una colección de instrumentos que Abraham Cupeiro muestra a través de un concierto-monólogo en el que viaja al pasado más remoto de nuestra especie a través de los sonidos de los instrumentos de viento. Este proyecto, surge de la inquietud de Abraham por conocer y recuperar instrumentos de todas las épocas y lugares.




Día 29 de junio
11:00 horas • Luis Delgado:
Organología fabulosa
12:30 horas • Carlos Blanco Fadol:
Teoría sobre origen, evolución e influencias de instrumentos musicales
17:00 horas • Visita al museo de la música de Luis Delgado
20:00 horas • Fetén Fetén: Concierto «El Mágico Planeta de los Instrumentos Insólitos»
«El mágico planeta de los instrumentos insólitos» es un maravilloso viaje a través de algunos de los ritmos y melodías que conforman el imaginario musical de Fetén Fetén, inspirado este en la música popular de España y del resto de Europa; de esta manera el dúo burgalés pretende transmitir valores como la reutilización, el reciclaje, la sostenibilidad, el respeto al medio ambiente o la importancia de conocer nuestras tradiciones.



Hasta el 24 de noviembre de 2024 ha continuado en activo la exposición:









Tuvo Valladolid fama de ser una ciudad sucia y maloliente, del mismo modo que sus músicos fueron considerados “mala gente” desde tiempos pretéritos. Dice el refrán que Dios escribe derecho con renglones torcidos y muy probablemente los escritores que visitaron la ciudad antes del siglo XIX tuvieron la oportunidad de comprobar por sí mismos tales extremos pues mencionan ambas lacras con mucha frecuencia en sus renglones: la invención de la música puede atribuírsele a un dios, pero no siempre sus seguidores fueron de estirpe divina.
Tomé Pinheiro da Veiga, visitante de la ciudad a comienzos del siglo XVII, colocaba a los intérpretes musicales en el último escalón social, alegando que los consideraba “como la peor canalla de cuantas hay”, contando además para demostrarlo con el aval de algún que otro fraile o clérigo local, como por ejemplo su amigo Fray Próspero. La Fastiginia y el Diario Pinciano ofrecen algunos ejemplos de cómo los clérigos insultaban a los músicos y éstos se defendían lo mejor que podían, dándose a entender con todo ello que ni siempre la música era “celestial” ni sus intérpretes unos angelitos.
A los lugares en que habitualmente se podía “disfrutar” de la música (la Corte y palacios de la nobleza, los templos, los teatros y las plazas públicas), se podrían añadir los talleres en que se fabricaban o vendían instrumentos, espacios muchas veces poco o mal conocidos. Músicos cortesanos, de capilla, de escenario y populares (incluyendo entre éstos a quienes amenizaban los cafés a fines del siglo XIX) fueron los encargados, pues, de alegrar durante cientos de años la vida de ricos y pobres vallisoletanos con los sonidos, las escalas y las tonadas de sus instrumentos.
4 de febrero de 2024. Teatro Circo Price, Madrid







Jueves 27 de junio de 2024. La 8 Valladolid
«El conocimiento y uso correcto del entorno son esenciales para vivir y convivir»
Enlace al artículo en «La Razón» >

Como el sabio de los versos de Calderón, que recogía lo que otro tiraba, Joaquín Díaz ha recolectado siempre lo que la sociedad ha desdeñado y desde esa actitud ha cimentado toda una vida consagrada a la interpretación del hombre a través del análisis y difusión de la cultura tradicional... Leer +

Enlace al blog original de «Daniel el payaso» >
El día 14 de noviembre de 2024 la 8 de Castilla y León Televisión emitió el programa 'Cuéntame Un Cuento', presentado por Rosana Largo, con Joaquín Díaz como protagonista.
9 de enero de 2024
La Junta Directiva de la Academia de la Música de España ha acordado por unanimidad nombrar Académico a Joaquín Díaz. La Academia le ha comunicado que «es un verdadero honor contar con una persona de su relevancia y valía profesional como parte activa de la Academia. Sin duda, su incorporación a la comunidad de Académicos contribuirá a enriquecer este proyecto tan ilusionante y necesario».
Presentación de la Academia de la Música de España, que cuenta con 500 miembros de diferentes sectores de la Música: artistas, autores, productores, editores, mánagers y promotores.
25 de febrero de 2024
Joaquin Diaz nombrado Socio de Honor de AEDA (Asociación de profesionales de la narración oral en España) «por su pasión y su afán divulgador de la cultura popular; por su empeño en el trabajo de campo, la investigación y el estudio del folklore tradicional; por su trabajo como recopilador de cuentos tradicionales y, también, como narrador de cuentos».

14 de mayo de 2024. Valladolid








Javier Alonso, doctor en Historia, profesor y portavoz de Pajarillos Educa, recuerda que este era un espacio perdido en el barrio, una plaza sin nombre, un corredor que unía las calles Tórtola y Pelícano sin que nadie supiera a ciencia cierta cómo llamarlo con propiedad. La plaza del centro de salud era el nombre más repetido, aunque no hubiera referencia en el callejero ni forma de encontrarlo en Google Maps.
Hasta ahora.
El Ayuntamiento ha informado este miércoles de que este espacio de la zona este, en los barrios Pajarillos-San Isidro, recibirá el nombre de Joaquín Díaz. La asociación vecinal de San Isidro ya reclamó el pasado año, durante la celebración de las fiestas del barrio, que el etnógrafo y divulgador prestara su nombre a la plaza. El alcalde, Jesús Julio Carnero, ha aceptado esta petición y recordado que Díaz (Zamora, 1947, en Valladolid desde 1951) es «una de las figuras más relevantes en el estudio y divulgación de la cultura tradicional»...
Leer +
15 de junio de 2024. Olmedo (Valladolid)
El 15 de junio se celebró en la Corrala del Palacio del Caballero, en Olmedo, un homenaje a Manuel Rodríguez Centeno, socio de la Asociación de Amigos de la Fundación y persona muy querida por sus dotes musicales y su calidad humana. Joaquín Díaz introdujo el acto con estas palabras:
Podría darnos la sensación -equivocada, desde luego-, de que el mundo es cosa de anteayer y de que somos sus mejores y más preparados habitantes. No es así: la historia del pensamiento humano es larga y difícil. Sus bases se fueron estableciendo poco a poco sobre la observación curiosa del fascinante cosmos, que dio como resultado el nacimiento de creencias que generaron mitos, mitos que conformaron relatos legendarios, relatos que dieron sentido a fórmulas de comunicación, etc. Pero a pesar de que los mitos reflejaban las obsesiones e ideas de individuos primitivos, hechos que luego se iban plasmando en leyendas, su lenguaje –el lenguaje en el que llegaron hasta nosotros- fue, desde Homero, el de la comunicación, esa forma de transmitir los conocimientos que pretendía relatar las creencias acerca del origen de nuestra especie, de sus presuntos pecados, del castigo infligido por ellos o de la regeneración a través de un sacrificio o por medio de la venida a la tierra de un dios. Son ideas que perpetúan todavía hoy antiguas doctrinas de cuyo origen y desarrollo es responsable el ser humano con toda su carga de sueños, de esfuerzos y de preocupaciones. Pero el lenguaje usado, como digo, concebía la narración de todas esas antiguas leyendas sólo como una progresión de hechos que tenían coherencia entre sí porque se narraban sucesivamente y poseían un hilo conductor que los encadenaba. Decía Salustio, el autor de una obra titulada «Los dioses y el mundo» que los mitos imitaban a los dioses, y de esa forma los tenían cerca y los recordaban.

Cuenta una leyenda de esa Grecia primitiva a la que tanto debemos, que cada vez que los dioses se preocupaban por los humanos y tenían curiosidad por ver qué estábamos haciendo, se abría el firmamento para dejar salir una mirada luminosa que, al menos por un momento, permitía a los habitantes de la tierra observar el resplandor del ojo celestial. Se llamasen perseidas, oriónidas, o más tarde meteoroides y lágrimas de san Lorenzo, las estrellas fugaces siempre reclamaron nuestro asombro y nuestra admiración. Sobre su rápido destello también se crearon curiosos mitos, que nos hablaron de la forma de conseguir que se cumpliesen nuestros deseos o del medio eficaz para acordarnos de alguien querido.
Hay personas que pasan por nuestras vidas como las estrellas fugaces en el cielo. La duración de su tránsito suele parecerse a una exhalación y es tan breve como la fascinación que despierta en nosotros, pero su luz, la luz que arroja por un momento sobre nuestra oscuridad, ilumina las existencias de quienes la rodean y alumbra como un faro nuestro cabotaje de puerto en puerto.
Manolo fue una de esas personas. Su vida duró menos de lo que hubiese merecido por sus virtudes, que las tenía y bien destacadas. Entre todas ellas, mencionaré dos en las que fue un verdadero ejemplo: el trabajo y el trato. El trabajo porque, pese a las dificultades que el destino puso en su camino se empeñó en conseguir altas metas y las alcanzó. Realizó trabajo de campo, no dejó jamás el terreno de la interpretación que era su pasión, siguió dando clases culminando una vocación docente y haciendo partícipes a sus alumnos de su ilusión a toda prueba, e incluso se adentró en el mundo académico publicando algún artículo en el que se reflejaba su cariño a su tierra y al Olmedo de sus mayores. Recuerdo la ilusión con que me remitió para la Revista de Folklore un artículo sobre las rogativas a la Virgen de la Soterraña, recogidas a Tecla García y a Tere Molpeceres.
En cuanto al trato poco podría decir que no sepan quienes me escuchan esta noche. Todos los que hemos venido a rendirle este homenaje -familia, amigos, conocidos-, tuvimos ocasión de disfrutar de su cercanía: Manolo repartió sonrisas y afecto donde quiera que estuvo, y ese fue su mejor regalo. En el mundo de las creencias, son pocas las religiones que no respetan el recuerdo de los seres queridos. De ese modo, su memoria permanece y su figura se hace más grande y nítida al rememorar los hechos que le hicieron destacar o en los que sobresalió por sus méritos. Creo que no podría haberse elegido un acto mejor para rendir homenaje a Manolo que hacerlo con música, y precisamente con la música que fue el norte de su vida y de su dedicación. El cariño con que se ha preparado el concierto que vamos a escuchar, se adorna esta noche con su sonrisa y con su ilusión.
Joaquín Díaz
21 de junio de 2024. Valladolid

En el Palacio de la Diputación de Valladolid, el Presidente de la Institución Conrado Iscar hizo entrega a Diego Fernández Magdaleno del Premio anual «A la trayectoria artística». Joaquín Díaz pronunció la Laudatio:
En los actos de entrega del premio a la trayectoria artística que promueve anualmente la Diputación de Valladolid, es costumbre que alguien pronuncie una laudatio o alabanza de la persona premiada. Me corresponde hoy a mí ese honor, que trataré de desempeñar con mucho gusto, y podría añadir que casi con desenvoltura, pues no es la primera vez que tengo que glosar el trabajo y la personalidad de Diego Fernández Magdaleno. Su trabajo nunca será suficientemente reconocido porque la propia inquietud del premiado y la incesante actividad que desarrolla en diferentes ámbitos del conocimiento, convierten su currículo en una sinfonía inacabada y revolucionaria, que tan pronto se mira en los espejos del tiempo -y es el caso de uno de sus más recientes trabajos, compartido con Jordi Savall-, como se sumerge en un silencio poético para intuir las ausencias que llegarán inexorablemente, tal y como nos ha ofrecido en su último poemario. La personalidad de Diego podría explicarse, siguiendo los tratados de Galeno o de Avicena, ahondando en los aspectos emocionales de su carácter, que nos muestra un temperamento entre melancólico y flemático. Pero al mismo tiempo ese temperamento se convierte en un sistema musical, que oscila en virtud de sus propias necesidades armónicas.No practica Diego una música aislada de la existencia. Estamos ante un músico que comprende y ensaya muchas más artes que las interpretativas, haciendo de todas ellas un soporte para su vida y su trabajo.
El haber nacido en Medina de Rioseco no es un dato más o una simple mención geográfica en su biografía. Diego Fernández Magdaleno practica un riosecanismo activo y es en esa ciudad de los Almirantes donde gestiona su tiempo y revive lo cotidiano para ponerlo en orden y saborearlo como si fuese un café de Cubero. Huyendo de una sociedad que necesita oirse para existir, Diego ha renunciado a vivir y a triunfar en un mundo donde la locura y la fama solo pertenecen a los estúpidos, a los insensibles y a los agitados, como acertó a diagnosticar hace ya muchos años el escritor portugués Fernando Pessoa. Parafraseando a Francisco de Quevedo -que se denominó a sí mismo como Señor de la Torre de Juan Abad, ese pequeño y dulce retiro del Campo de Montiel-, podríamos alterar levemente sus versos para decir que Diego:
Retirado en la paz de Rioseco / con pocos pero doctos libros juntos
vive en conversación con los difuntos / y escucha con los ojos a los muertos.
Si no siempre entendidos, siempre abiertos, / o enmiendan o fecundan sus asuntos
y en músicos callados contrapuntos / al sueño de la vida hablan despiertos.

De algunos de sus maestros, Diego aprendió a valorar un tipo de enseñanza musical que fuese integral. De Miguel Frechilla, por ejemplo, tomó el consejo de insertar la música, que es algo intangible, en otros ámbitos humanistas como el artístico, el literario o el filosófico. De Pedro Aizpurúa aceptó la lección vital de respirar la belleza y la bondad, porque ambas necesitaban ser respiradas para renacer auténticas en un universo feo y caótico: la respiración profunda, inseparable, rítmica, que rescata, como el hallazgo de una olla con monedas de oro entre las ruinas, el insoportable encanto de la amistad. Hoy, cuando se habla más de destrucción que de vida, cuando empezamos a vislumbrar todo lo negativo que tuvo el siglo XX -tan cargado de guerras y de muerte-, cuando se cree más en un incierto futuro para los pueblos que en un amanecer esperanzado, Diego confirma rotundamente que, frente al vacío de los días y la inutilidad de las horas, frente al éxtasis que desembocará en el otoño, nos queda la memoria individual, que no es poco. Memoria con la que hemos construido los cimientos de nuestra vida, conversación tras conversación, melodía a melodía hasta que se nos ha hecho tan necesaria como el aire que respiramos. Ese aire leve y nuestro que encierra una mística, una línea del lejano horizonte donde la vida y la muerte se confunden añorando la cercanía de lo humano. En la muerte de Aizpurúa, Diego recordó una lección más de su maestro, en este caso patente y útil para todo uso y ocasión: por encima del perdón está el ser capaz de no sentirse ofendido.
De otro amigo admirado y cercano, Ramón Barce, recibió algo más que consejos. Con parte de su obra, y para conmemorar el aniversario de su fallecimiento, Diego estrenó 22 obras suyas en el Auditorio Nacional de Madrid. Toda la prensa se hizo eco del acto en términos elogiosísimos. Por ejemplo, Víctor Pliego de Andrés escribió al hacer la crítica del evento: «Las propuestas fueron muy variadas y Diego Fernández Magdaleno realizó la titánica tarea de estrenarlas todas con su toque impecable y un magnífico sentido de la musicalidad. Además supo encontrar un hilo conductor en la heterogénea colección reunida y acertó en la manera de ordenarla en una sucesión coherente».
Tal vez sin pretenderlo, Víctor Pliego señaló una de las claves que siempre sostuvo el edificio creativo de Diego Fernández Magdaleno: la coherencia. Frente al contorno brumoso y a veces oscuro que rodea la denominada «música contemporánea», él ha ofrecido la disciplina de su pensamiento analítico, llevando el estudio de cada una de las obras que interpreta al terreno de la personalidad de los autores, desvelando sus técnicas de composición a la luz de la idiosincrasia de cada uno. Dando al contingente desorden de un modernismo conceptual, la serenidad de una observación personal y sincera en la que predomina una clara estructura interpretativa. Tal vez esa cualidad, este innegable mérito, haya sido la causa por la que autores de muy diversas tendencias han confiado en Diego como el traductor más fiel de sus obras, como el traductor que domina ambos lenguajes -el de la creación y el de la interpretación- para dar la visión holística de una obra. De ese modo, más de 70 compositores han caminado de la mano de Diego en más de 300 estrenos absolutos de sus obras: Alís, Barce, González Acilu, García Abril, Claudio Prieto, Guinovart, Tomás Marco, Armand Grèbol, Jesús Legido, Teresa Catalán, Francisco García Álvarez, Ana Fontecha, Josep Soler, Elena González y tantos otros, han hablado por boca e interpretación de Diego.

De su incesante actividad da cuenta su currículo: profesor del Conservatorio de Música de Valladolid, del que fue director durante 4 años, y miembro de número de la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción, en la que ingresó con un discurso dedicado a la música española actual. Director del congreso sobre Creación musical contemporánea de Valladolid y Presidente en España de la Asociación europea de profesores de piano, ha rescatado del injusto olvido numerosas obras de autores españoles, presentando además integrales de músicos como Félix Antonio, Enrique Villalba o Jacinto Ruiz Manzanares. Escritor y poeta, a través de sus libros que abordan temas profesionales y humanos, Diego nos ha hecho partícipes de sus reflexiones sobre la música y el humanismo en tiempos adversos.
Sus grabaciones para Radio Nacional de España (Radio 1, Radio clásica, Radio 5…), para France Musique, RAI, BBC, Antena 3 y Televisión española, han contribuido a difundir en medios audiovisuales la magia de sus interpretaciones que, de otro modo, hubiesen quedado en el acto único e irrepetible de un concierto.
Diego ha recibido numerosos reconocimientos de instituciones, entre los que cabría citar el Premio Racimo de Música de la Fundación Serrada (2009), la Membresía de Honor de la Asociación Europea de profesores de piano (2009 también) el Premio «Un diez para diez» (2011), el premio «Servir» del Club Rotary (2012), así como el título de Hijo Predilecto de Medina de Rioseco (en 2013). Desde noviembre de 2017 preside el jurado del Premio internacional de piano Frechilla- Zuloaga. El premio Nacional de Música de 2010 vino a reconocer su extraordinario talento y la Cruz de la Orden de Alfonso X el Sabio -que se le otorgó este mismo año- sus trabajos en los campos de la educación y la cultura. Con el galardón que hoy se le entrega, finalmente, el jurado premia una trayectoria artística, plural y sobresaliente, dentro de los ámbitos de la música y el pensamiento.
Joaquín Díaz

El Ayuntamiento de Huesca y el Festival iberia@huesca.folk acordaron dar un homenaje a Joaquín Díaz en la edición de este año.

Aunque hubo que suspender el concierto en el que se iba a entregar el galardón por la descarga de una inesperada tormenta, el grupo Olga y los ministriles se atrevió a desafiar el chaparrón acompañando al homenajeado, quien recibió el trofeo de manos de las concejalas de Cultura y de Fiestas Sonia Latre y Nuria Mur, y pudo ver algunos de los lazos del Dance de Robres.


Por la mañana, y acompañado por Olga Orús y Salvador Cored, Joaquín visitó el mítico comercio de ultramarinos “La Confianza”, donde pudo retratarse con su actual propietaria, María Jesús Sanvicente.
El director de la Fundación asistió al acto de entrega del Ciprés de Honor de la Fundación Godofredo Garabito -de la que es Patrono de Honor- al filólogo y escritor Luis Alberto de Cuenca.
DAIMIEL TELEVISIÓN realizó el programa especial "La Faltriquera"
Interpretación conjunta de "La Melitona", como acto final del homenaje a Joaquín Díaz realizado en el contexto del 52 Festival de Música Folk Tablas de Daimiel. Además del propio Joaquín, se encuentran en el escenario Sandalio Morales, así como los componentes de La Camerata Cervantina, Aljibe, Vigüela, Jaraiz, Arrabal y Nuevo Mester de Juglaría.
Vídeo emitido durante el homenaje a Joaquín Díaz celebrado el 11 de octubre de 2024, en el contexto del 52 Festival de Música Folk Tablas de Daimiel. Incluye los saludos de Carrión Folk, Las Colmenas, Vanesa Muela y Alquitara.
Vídeo emitido durante el homenaje a Joaquín Díaz celebrado el 11 de octubre de 2024, en el contexto del 52 Festival de Música Folk Tablas de Daimiel. Incluye los saludos de Martirio, Karmento y Rozalén.
Fragmento de la intervención de "La Camerata Cervantina" en el homenaje a Joaquín Díaz celebrado el 11 de octubre de 2024 en el contexto del 52 Festival de Música Folk Tablas de Daimiel. Se trata concretamente del tema "Aleluyas de un matrimonio feliz".
https://www.facebook.com/festivalfolktablasdedaimiel/?locale=es_LA
Homenaje a Joaquín Díaz, el día 11 de octubre a las 20:30h. Teatro Ayala de Daimiel.
El Consejo de la Federación Italiana de Tradiciones Populares entrega el prestigioso Premio Internacional “Giuseppe Cocchiara” (2024) al profesor José Luis Alonso Ponga.

Jean-François Botrel, hijo adoptivo de Asturias por sus estudios sobre Clarín
Jean-François Botrel fue reconocido como “Hijo Adoptivo de Asturias” por el Principado de Asturias. Esta distinción se otorga a quienes hayan destacado por sus servicios en beneficio de Asturias sin ser naturales de esa comunidad autónoma. La propuesta fue presentada por el Consejo de Gobierno asturiano, y reconoció al hispanista como destacado especialista mundial de la figura de Leopoldo Alas Clarín, coincidiendo el reconocimiento con los 140 años de la primera edición de ‘La Regenta’.
Jean François Botrel (Rennes, 1942), es catedrático emérito de Lengua y Cultura Hispánicas de la Universidad Rennes 2. Sobre Clarín ha publicado, entre otros, los textos ‘Clarín práctica y teoría del periodismo’ y ‘Novela e ilustración: La Regenta leída y vista por Juan Llimona, Francisco Gómez Soler y demás’. En 2005 recibió la Encomienda de la Orden de Isabel la Católica.

Pedro Cátedra, nuevo miembro de la Real Academia Española de la Lengua
El filólogo Pedro Manuel Cátedra García (Gabia Grande, Granada, 1954) ingresó como miembro de número de la Real Academia Española para ocupar la silla A.
Cátedra se incorporó a la Academia tras su elección por el Pleno de la RAE en la sesión del 8 de junio de 2023. Su candidatura fue presentada por los académicos Francisco Rico, Inés Fernández-Ordóñez y Juan Gil. Fue este último el encargado de dar al nuevo académico la bienvenida a la Academia y de responder a su discurso de ingreso. Pedro Cátedra analizó en dicho discurso Los dotze treballs de Hèrcules, «libro que Enrique de Villena, heredero del marquesado de ese nombre, compuso en catalán en 1417, y que autotradujo al castellano apenas seis meses después, viviendo ya en Castilla».
La Fundación felicita a ambos por los reconocimientos a su trabajo y por su magisterio.
El fondo fue regalado por las monjas a un anticuario, para ser posteriormente rescatado por Joaquín Díaz. Los 1.482 documentos, fechados entre los siglos XVIII y XIX, se custodian hoy en la biblioteca histórica Marqués de Valdecilla de Madrid.
















• Enero 26
Joaquín Álvarez Barrientos: Costumbrismo y costumbres. Lo que pasa entre nosotros
• Febrero 23
Juan José Prat Ferrer: Los grandes temas de la cuentística
• Marzo 15
Miguel Delibes: La Tierra herida
• Abril 19
Joaquín Díaz: Papeles para plegar. La vida en dobleces
• Mayo 31
Manuel Amezcua: Creer y curar. Medicina popular
• Octubre 25
Guillermo Herrero: La encuesta del Ateneo
• Noviembre 29
Luis Alberto de Cuenca: Poesía griega arcaica y sus metamorfosis en mi poética
• Diciembre 27
Arturo Martín Criado: Promesas y exvotos








21 de febrero de 2024. Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción. Valladolid

Joaquín Díaz intervino en el ciclo «Conocer Valladolid» del año 2023/24, de la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción con la conferencia: «Los discos dedicados y de felicitación en EAJ47. Radio Valladolid».


4 de marzo de 2024. Videoconferencia
En la Universidad Autónoma de Barcelona, en la sede del Instituto de Estudios Medievales, se celebró una mesa redonda sobre 'Plecs pòetics' con la intervención de Antoni Rossell (moderador), Adriana Camprubí, Joana Escobedo y Joaquín Díaz, con motivo de la celebración del 30 aniversario del Archivo Occitano.
El 20 de marzo es el Día Mundial de la Narración Oral y, como es tradición en AEDA, han pedido a Joaquín Díaz, Socio de Honor de AEDA en 2024, que compartiera unas palabras para celebrarlo. Una celebración del cuento de tradición oral y una reivindicación de las personas que cuentan cuentos.
Joaquín Díaz participó en la IX Jornada sobre narración oral y literatura 2024, donde le fue entregado el premio de AEDA.


El miércoles 4 de diciembre de 2024 tuvo lugar la conferencia «Hacedores de sonidos», donde Joaquín Díaz ofreció un recorrido ilustrado por los sonidos antiguos de la ciudad de Valladolid.
En el salón principal del Círculo de Recreo de Valladolid, calle Duque de la Victoria, 6.



A cargo de los periodistas D. Javier Cuevas y D. Francisco Alcántara. Moderador el académico D. Joaquín Díaz.


Creación videográfica de Arantxa Morán sobre música de Joaquín Díaz
Número XVI de 2023
Joan Josep Gutiérrez Yzquierdo. Associació Muzio Clementi de Barcelona




Manuel Moreno Canosa


El LiDAR (Light Detection and Ranging), es una técnica de teledetección que permite calcular la distancia entre dos puntos mediante la emisión de pulsos de luz a través de un escáner láser. Al emitirse de forma ininterrumpida gran cantidad de pulsos en múltiples direcciones se obtiene como resultado un escaneo 3D del terreno. En la actualidad, esta herramienta es parte esencial de la topografía, y desde principios de siglo de la arqueología. A través de un procesamiento de los datos LiDAR se generan imágenes monocromáticas que permiten mediante su visualización la localización de anomalías, que se pueden corresponder o no con lugares de interés arqueológico. En este trabajo, la interpretación de datos LiDAR, la observación de ortofotos y la comprobación visual en campo, han sido parte de la metodología empleada, con el objetivo de elaborar un catálogo donde se recojan diferentes puntos de interés arqueológico dentro del municipio de Urueña (Valladolid). Además, se busca reseñar la gran variedad de enclaves que faltan por estudiar, comprobando a la vez la idoneidad de esta metodología aplicada a los paisajes de la meseta.
Claudia García Hernández


Se ha llevado a cabo una prospección etnobotánica en las comarcas Tierra de Alba y Aliste (Zamora). La información recopilada engloba los usos tradicionales y los nombres vernáculos de 88 taxones de plantas vasculares. Los objetivos del estudio son: estudiar el conocimiento tradicional, cuantificar la vigencia de uso, comprobar si los usos recopilados están documentados en la bibliografía, y analizar la evidencia farmacológica de las especies medicinales. Se han catalogado 271 registros de uso (RU). Las familias más importantes son Lamiaceae con 44 RU y Asteraceae con 26 RU. Una de las especies más utilizadas es Cistus ladanifer L. (9 RU), y los usos más citados son el medicinal (87 RU) y el alimentario (66 RU). En lo relativo a la vigencia de uso, de las 57 especies valoradas, 25 han sido abandonadas en todos sus usos. En la comparación bibliográfica se han hallado seis registros de uso novedosos. En cuanto a la evidencia farmacológica, un 90 % de las especies evaluadas presentan evidencia y un 50 % del total están testadas y aprobadas clínicamente.
Joaquín Saura Buil


Joaquín Saura ha pasado décadas de su larga y fructífera vida estudiando y construyendo los instrumentos imaginados por Leonardo da Vinci, perdiéndose en sus cientos de bocetos y descifrando sus intrincadas notas. Todo ello ha hecho que, ante el equilibrio contundente del cuadro de La Última Cena del Convento Dominico de Santa María delle Grazie de Milan, Joaquín comenzase a formularse preguntas sobre sus proporciones, sus efectos ópticos, su entorno, sus luces, etc.
En este trabajo Saura nos desvela de forma incontestable las claves utilizadas por Leonardo da Vinci en su obra más trascendente. Pacientemente, y uno por uno, analiza los elementos de la pintura y las circunstancias que la rodean, desvelándonos una intrincada estructura de proporciones musicales que acabará por fascinarnos y nos hará admirar aún más esta obra magna del arte universal.
Edición digital: Fundación Joaquín Díaz • 2024
Los «Temas didácticos de cultura tradicional» fueron unos cuadernos editados a partir de 1986 por el entonces recién creado Centro Etnográfico de Documentación, germen de la Fundación Joaquín Díaz, en la Diputación de Valladolid. Casi treinta autores desarrollaron temas dirigidos especialmente a profesores y alumnos que quisieran ampliar sus conocimientos sobre el mundo de la tradición y el patrimonio. La publicación en formato digital permite ahora disfrutar de una fuente de datos que no ha perdido un ápice de su interés pese al transcurso de los años.
Joaquín Díaz
Puede descargarse cada cuaderno haciendo click en la correspondiente portada:
Edición digital: Fundación Joaquín Díaz • 2024
Con la denominación Álbumes históricos se incluyen en esta sección algunos libros y documentos pertenecientes a la biblioteca de la Fundación que, por su valor o rareza, pueden ser considerados únicos o de alto interés bibliográfico.
Puede descargarse cada album haciendo click en la correspondiente portada:
Joaquín Álvarez Barrientos
Edición digital: Fundación Joaquín Díaz • 2024
Edición original impresa: Ámbito Ediciones S.A. y Joaquín Álvarez Barrientos
118 páginas
ISBN: 84-8183-089-5
Puede descargarse gratuitamente en formato PDF 16,6MB
Índice
Presentación
En los inicios
La cultura tradicional. Cultura angustiosa y cultura plácida
El cuerpo. Las edades de la vida
La música
El trabajo de campo y de gabinete
Viaje, tiempo y religión
Sobre los maestros. Yo soy músico
La imagen de España
La historia y la cultura popular
El baile, el teatro y la indumentaria
El amor y el odio
La risa, la locura y el carnaval
Urueña
Los trabajos y sus días

Presentado en el Círculo de Recreo de Valladolid, el 12 de noviembre de 2024. Salón Principal del Círculo de Recreo. C/ Duque de la Victoria 6.
Edición digital: Fundación Joaquín Díaz • 2024
189 páginas
ISBN: 978-84-126425-7-5
Martes 12 de marzo de 2024. Círculo de Recreo de Valladolid

Se presentó en el Círculo de Recreo de Valladolid, en colaboración con la Fundación Joaquín Díaz y el Museo de la Música de Urueña, el libro «La música de la perspectiva en La Última Cena de Leonardo da Vinci». Con la intervención de su autor, Joaquín Saura, al que acompañaron Joaquín Díaz, Luis Delgado y Antonio Baciero.
Martes 12 de marzo de 202425 de abril de 2024. Madrid
Joaquín Díaz, José Ramón Pardo, editor del libro-disco, y el propio autor, Xavier Ribalta, presentaron el jueves 25 de abril el trabajo diseñado y maquetado en la Fundación.

José Ramón Pardo, Jesús Antonio Cid y Joaquín Díaz


Sentados, de izquierda a derecha: Jon Juaristi, Xavier Ribalta, Joaquín Díaz, Ana Valenciano y Ramón Andreu.
De pie, de izquierda a derecha: Teresa Tortella, Susana Martín Zaforas, Milagros Laín,…, Jesús Antonio Cid (Presidente de la Fundación Menéndez Pidal), José Luis Forneiro, Isabel García Muñoz, José Ramón Pardo y Sara Catalán (hija de Diego Catalán y bisnieta de Don Ramón Menéndez Pidal).
Conocí a Xavier Ribalta en Valladolid en 1968. Ya sabía que existía, porque en aquella España de los años 60, todo lo que se hacía en Barcelona o en París o en Nueva York llegaba a quien quería que le llegase, pero le conocí por fin personalmente en un recital que se hizo histórico por muchas razones. Hace poco precisamente lo recordaba con Paco Ibáñez, el otro protagonista de aquel evento -ambos constructores del proyecto inolvidable de Moshe Naim que se llamó Los unos por los otros-, y hablábamos del entusiasmo de aquella noche con un público entregado, de los problemas de los dos intérpretes con aquel dichoso censor, o inspector de la brigada político social, que quería mantener las luces de la sala encendidas para vigilar mejor cómo se enardecía la grada, de la eufórica salida del teatro Carrión y de las carreras finales delante de las porras de la policía que dejaron la calle despejada. Yo salí más tarde, después de saludar a ambos cantantes, y quedé sorprendido por la soledad de las calles. Sorprendido y tan desolado como aquellas mismas calles...Alguna vez he escrito sobre esos años. La historia de la España de la posguerra es inabarcable. Nadie podrá condensar en palabras los sentimientos, pasiones, sufrimientos e ilusiones de quienes vivimos en aquellos años. A pesar de todo, algunos poetas y músicos fueron ofreciendo su particular mirada, su interpretación casi siempre angustiada del entorno. A todos les unía la misma ansiedad por transformar la realidad, la misma voluntad de lucha contra la injusticia arbitraria o contra la opresión insensata. Hay quien opina que la censura pudo ser un acicate para la creación; un escollo que debía de salvar el autor con mucho ingenio y algo de fantasía. Me da mucha tristeza pensar que cabría una justificación, por ligera que fuese, a un acto tan manifiesto contra la libertad. Frente al hecho cierto de que quienes ejercían el oficio llegaron a hacerse comprensivos en las épocas en que comenzó a degenerar el uso y el sentido de su función, hay que tener en cuenta también que su actividad generó un miedo con frecuencia obsesivo y casi paranoico en muchas personas.
Pero vuelvo al recital: lo que más me sorprendió y sigue constituyendo hasta hoy un maravilloso secreto fue el descubrimiento de la trascendencia en la elección de los repertorios y la importancia de una buena selección de textos y melodías a la hora de comunicar, cosa en la que Xavier Ribalta y Paco Ibáñez ejercían ya un magisterio incontestable. Siempre he pensado que si hay algo de lo que puede enorgullecerse un cantante -ya hablemos de un juglar medieval o de un cantautor del siglo XXI- es de dar nueva vida a las palabras de un poeta al que elige como compañero de viaje porque le toca el corazón. Así, a la comunicación abstracta se opone el acto concreto de compartir una experiencia vital común que aporta, como en el caso del amor, frescura y pasión al acto poético o musical. De ese modo, como diría Paul Zumthor, la actuación del intérprete compromete a toda su persona: «el conocimiento, la inteligencia, la sensibilidad, los nervios, los músculos, la respiración…» Leyendo las palabras de Zumthor es evidente que no habla de juglares anónimos, de bardos transgresores, de trovadores enamorados, de actores falaces, de poetas ingeniosos, sino de «personas», personas que traducen un compromiso –el de comunicar sabiduría y emoción- a través de su voz, que envuelve al oyente y le eleva por encima de la realidad, destacando al mismo tiempo su pertenencia a una tierra y a una cultura y subrayando con trazos indelebles el valor mítico de la memoria. Personas especializadas, pues, en un acto de comunicación que consiste en recibir y dar en constante alternancia: primero se forma la mentalidad (que sirve para entender) y la memoria (con el fin de aprender, interiorizar y recordar), para después utilizar la voz, el ritmo y el gesto en el acto de entregar. Tendríamos que preguntarnos si han pasado realmente ocho siglos porque el oficio de juglar sigue siendo ahora tan necesario como entonces.
Rafael Alberti escribió de Xavier Ribalta que no se parecía a los demás cantantes o cantautores de su época porque su voz era más terrestre, "como salida del fondo de una hondonada natural, en busca de la ancha expansión del viento libre y expresada en esa bella lengua de la tierra áspera". Es hermosa la definición, como todas las cosas que tocaba o decía Alberti, pero tal vez es solo una bonita descripción de la parte más evidente de Xavier, esa que le une a un lugar y a una lengua. Yo añadiría que una de las grandes cualidades que adornan a Xavier Ribalta, y que probablemente tenga que ver con su elegancia humana y con su capacidad de reflexión, es su tremenda habilidad para descubrir la poiesis en un mundo que camina precisamente en dirección contraria. A lo largo de casi treinta cuidadas ediciones a cuál más interesante y novedosa ha ido seleccionando poetas y poemas imprescindibles. En la nómina, nada menos que Joan Maragall, Salvador Espriu, Apelles Mestres o Joan Margarit artistas completos y universales.
Al escuchar a Xavier me he acordado muchas veces de que, nada más entrar en la universidad preferí doctorarme en Brassens antes que en derecho romano. Elegí con plena consciencia el misterioso jardín de las palabras y nunca me he arrepentido, porque es a jardineros como Xavier, o como Paco Ibáñez, a quienes debo los mejores momentos de mi vida. Fueron ellos quienes seleccionaron las flores más intensas y fragantes y quienes educaron mis sentidos.
Del repertorio que ha seleccionado Xavier para este disco libro me quedo con tres temas: «Duérmete fiu del alma» porque es una canción que me habla de mis propios orígenes, «Al vent» porque forma parte de mi propio repertorio durante los años como intérprete y «Grandola vila morena» porque tiene recuerdos inolvidables de Portugal: el año 1968 fui invitado por Movieplay Portugal -donde estaba de director Carlos Pérez Alvaro y de jefe de promoción Antonio Rolo Duarte- a hacer una gira por el país con muchos recitales y programas de televisión. Antes de la actuación en el teatro Vilaret de Lisboa, unos amigos del partido comunista portugués me llevaron a su casa de Oeiras para una reunión con otros cantantes portugueses como José Afonso dos Santos o Mario Correa de Oliveira. El encuentro -en un piso pequeño y como piojos en costura- me permitió escuchar de forma casi íntima (José Afonso estaba tan pegado a mí que casi podía susurrármelo) el tema que luego sería el comienzo del levantamiento contra Marcelo Caetano. Recuerdos y vivencias que hay que agradecer al gran cantor Ribalta.
Joaquín Díaz