Nació Gregorio, al que Croiset llama el Teólogo, en Nacianzo, en la Capadocia. Fue en el pequeño pueblo de Arianzo y su madre fue Santa Nona. Asistió en su juventud a la universidad de Atenas donde coincidió con San Basilio y, según el Año Cristiano, volvió a Nacianzo donde recibió el bautismo de su propio padre que había sido consagrado obispo por sus méritos y vida ejemplar. Casi siempre se le representa sentado en una mesa o pupitre y redactando o escribiendo, razón por la cual se le considera patrono de los poetas pues compuso numerosos carmina y abundantes epigramas. En una oración de amor hacia los pobres escribe:
Si estás sano y eres rico, alivia la necesidad de quien está enfermo y es pobre; si no has caído, ayuda a quien ha caído y vive en el sufrimiento; si estás contento, consuela a quien está triste; si eres afortunado, ayuda a quien ha sido mordido por la desventura. Da a Dios una prueba de reconocimiento para que seas uno de los que pueden hacer el bien, y no de los que tienen que ser ayudados. No seas sólo rico en bienes, sino en piedad; no sólo en oro, sino en virtudes, o mejor, sólo en ésta. Supera la fama de tu prójimo siendo más bueno que todos; conviértete en Dios para el desventurado, imitando la misericordia de Dios.
CREENCIAS
Se cree que San Gregorio padeció toda su vida de enfermedad gotosa y que a ella se debían los frecuentes "achaques" que se mencionan en su biografía y que le hicieron retirarse en tantas ocasiones de la vida pública con abundantes y crueles dolores. En una de sus controversias con Máximo, un intrigante a quien había nombrado obispo el mismo Patriarca de Alejandría y que quería sustituirle en la sede de Constantinopla, no quiso crear polémica y decidió alejarse de la ciudad, pero al acudir con enormes dificultades al templo para despedirse de sus fieles, éstos le obligaron a gritos y con súplicas a quedarse.
FIESTAS
Es fiesta local en:
Villaverde de Medina (Valladolid)
Peleagonzalo (Zamora)