Se considera a Fausto, al igual que a sus compañeros de martirio, hijos de San Marcelo, centurión romano de las legiones asentadas en León. En un himno del oficio mozárabe se recuerda su martirio, en la época del emperador Diocleciano. Acusados por el prefecto Eugenio de no adorar a los ídolos del imperio, los tres jóvenes fueron condenados a ser atormentados en el potro. Aunque el documento no describe ninguna otra atrocidad cometida con ellos hasta la muerte, sin embargo Croiset habla de que se les cortaron las orejas, las narices, las cejas, el labio superior e incluso les fueron arrancados los dientes del maxilar superior. Finalmente, en lo que coinciden los documentos, fueron arrojados a una hoguera. Sus cuerpos se hallaron en una fosa común en la iglesia de San Pedro, en Córdoba, en el siglo XVI, y desde entonces se les venera como mártires.
FIESTAS
Es fiesta local en:
El Arenal (Ávila)
Fresno de Caracena (Soria)