La historia de San Pedro Celestino reviste características propias e interesantes. Aparte de su humildad, o tal vez por ella, es uno de los pocos Papas que renunció al cargo unos meses después de haber sido elegido para el pontificado, para lo cual tuvo que promulgar una constitución que autorizaba a los Papas a tomar esa decisión. Siendo el undécimo de una familia de doce hijos buscó en el estudio y en la oración la vocación antes de elegir como forma de vida la penitencia y el silencio de las cuevas, al modo que lo hicieron tantos otros eremitas que se alejaron del mundo. Pronto despertó su vida admiración y comenzaron a surgir discípulos que deseaban seguir su ejemplo, así que formó una pequeña congregación y buscó en el Concilio de Lyon convocado por Gregorio X la confirmación a su orden que se llamó de los Celestinos -por el nombre elegido por Pedro cuando fue proclamado Papa, que fue el de Celestino V- y se acogió a la regla de San Benito por una bula de Urbano IV. Murió en 1296 y el Papa Bonifacio VIII -el mismo que le había encarcelado intentando evitar que su dimisión provocara un cisma en la Iglesia- fijó la celebración de su fiesta para el 19 de mayo.
FIESTAS
Es fiesta local en:
La Aguilera (Burgos). Fiesta de San Pedro Regalado
La Encina (Salamanca)