Dice la tradición cristiana que San Pedro llegó a Antioquía después de haber convertido y bautizado al centurión Cornelio. Siguiendo las mismas fuentes se cree que el primer papa se estableció hacia el año 40 en Antioquía, donde habían predicado antes San Bernabé y San Pablo. Durante siete años estuvo San Pedro en esta ciudad hasta que se trasladó a Roma, a la que llamó en alguna epístola "Babilonia" por sus costumbres licenciosas y por estar dominada por las supersticiones. La Iglesia, a partir del tercer Concilio de Milán estableció que los obispos celebrasen cada año el aniversario del día en que se ordenaron o en que se consagraron, llamado también día del "nacimiento episcopal". En el cuarto Concilio se añadió que se anunciase al pueblo ese día y se anotase en el calendario para que todos los fieles pudiesen acordarse de su obispo y pedir por él.
CREENCIAS
En un Flos Sanctorum del siglo XV se asegura que la coronilla que se hacía ritualmente a los sacerdotes provenía de una burla que los habitantes de Antioquía hicieron a San Pedro para humillarle. De ello se tomó la costumbre:
E el cerceno da a entender que los clérigos deben echar de sí todos los malos pensamientos e ser prestos para ir a saber la palabra de Dios. E no deben tener ninguna cosa de las temporales, salvo lo que han de menester. E otrosí es redonda porque da a entender que los clérigos deben servir a Dios que non ha comienzo ni fin, así como la figura es redonda e muy fermosa, ca Dios a todas las criaturas del cielo fízolas redondas para dar a entender que los clérigos deben haber fermosura dentro en el ánima e fuera en la vida.