Croiset considera al apóstol Bartolomé, el sexto de los elegidos por Jesús para difundir su doctrina y uno de los más atentos a sus predicaciones. Añade que, durante la Pasión de Cristo, estuvo encerrado en la casa en que se habían hospedado en Jerusalén y sólo salió para comprobar la resurrección y para atender con los demás apóstoles a la creación del símbolo de la fe y para la repartición de las tierras por las que se dispersarían y en las que habrían de extender la palabra de Cristo. A San Bartolomé le correspondieron Licaonia, Albania, Armenia y las Indias orientales. Tras predicar y convencer con sus milagros, incluso convertir al rey Polimio, fue ordenado ejecutar por Astiages, hermano del rey y nuevo monarca quien le acusó de haber pervertido a Polimio. Según unos escritos fue crucificado, según otros desollado vivo y algunos incluso afirman que fue decapitado.
CREENCIAS
Entre las leyendas que se atribuyen a la predicación de Bartolomé en la India, está la que se refiere al templo de Astaroth. Según la relación de las jerarquías de ángeles que fueron castigados por Dios por rebelarse contra su poder, están Belcebú, Leviatán, Asmodeo, Berith y Astaroth, entre otros. Sus antagonistas en el lado del bien eran, respectivamente, San Francisco de Asís, San Pedro, San Juan Bautista, San Bernabé y San Bartolomé. La leyenda de San Bartolomé cuenta que, al llegar a la India se asentó en el templo de Astaroth, que servía de hospital al mismo tiempo ya que el dios, aunque prometía que curaba, desde que llegó el santo sólo conseguía detener el proceso de la enfermedad y los afectados debían permanecer en el templo durante mucho tiempo. Preguntando en otro templo por la razón de que los enfermos hubiesen quedado en ese estado, otro de los dioses o ángeles caídos, Berith, cuenta que es por culpa de Bartolomé y les da una descripción para que lo identifiquen:
Es un hombre de estatura corriente, cabellos ensortijados y negros, tez blanca, ojos grandes, nariz recta y bien proporcionada, barba espesa y un poquito entrecana. Va vestido con una túnica blanca estampada con dibujos rojos en forma de clavos y con un manto blanco también ribeteado con una orla guarnecida de piedras preciosas del color de la púrpura. Ya hace veintiseis años que lleva esa ropa y las mismas sandalias. Durante todo ese tiempo ni sus vestuiduras ni su calzado se han deteriorado ni manchado...
Cuando van a buscarlo, se hace invisible, aunque finalmente aparece y vence a los dioses.
EXPRESIONES
La tradición conserva un "conjuro" en el que San Bartolomé actúa de mediador y protector: San Bartolomé se levantó
cara y manos se lavó
y a Jesucristo encontró:
-¿Dónde vas, Bartolomé?
-¡Oh!, señor, cómo se "vía"
¡oh! Señor cómo se ve.
-Vuelve atrás Bartolomé,
a tu casa y tu mesón.
Donde tú seas nombrado
no caerá piedra ni rayo;
ni mujer muera de parto;
ni criatura de espanto.
Santos y santas acompañaremos
santos y santas acompañaréis.
AUDIO
A por ellos.
Canto festivo del encierro de los toros en Cuéllar (Segovia). Interpretan los dulzaineros hermanos Ramos. El sábado anterior al ultimo domingo de agosto se inicia la fiesta y se interpreta esta pieza en el inicio de las fiestas dedicadas a la Virgen del Rosario y en los posteriores encierros. Interpretan Juan José Sanz (dulzaina), Mª Carmen Riesgo (dulzaina) y Miguel González (caja) de Cuéllar (Segovia) en 1987.
AUDIO
A por ellos
Gozos a San Bartolomé, de Melgar de Arriba (Valladolid).
Cantados por el señor Samuel y sus primas.
Grabado por Joaquín Díaz el 14 de junio de 1995.
AUDIO
Gozos a San Bartolomé
FIESTAS
Es fiesta local en:
Casavieja (Ávila) | Cubillas de Cerrato (Palencia) |