El nombre de esta advocación es probablemente producto de una casualidad. Queriendo la Iglesia de los primeros siglos fomentar la devoción a la Virgen y habiendo observado que muchas veces el día 25 de marzo podía coincidir con las fechas de la Pasión y por tanto ser época de dolor, en el décimo Concilio de Toledo, en el año 656, se decidió cambiar la fecha de la Anunciación y nombrarla de la Expectación del parto, situándola el 18 de diciembre, una semana antes del nacimiento de Cristo. Al preparar la liturgia del día observaron que todas las antífonas que se decían al Magnificat de la misa comenzaban con la letra O, por lo cual decidieron poner a la fiesta, de Nuestra Señora de la O.
CREENCIAS
Muchas mujeres que estaban esperando a dar a luz solían ir a una misa de madrugada que se hacía en este día 18 de diciembre, con la esperanza de que la Virgen las socorrería en su parto. También durante muchos años, los estudiantes madrileños, con el permiso del Rector y de la autoridad competente, se dedicaban este día a estampar la letra O en puertas y paredes de edificios porque solía ser el día en que daban las vacaciones de Navidad.
EXPRESIONES
O Virgo Virginum
Oh Virgen de Vírgenes
¿Cómo podrá realizarse esto?
Porque no ha habido antes
otra como tú ni la habrá.
¿Por qué os admiráis de mí
hijas de Jerusalén?
Misterio divino
es lo que contempláis.