Entre las muchas canciones, danzas y romances que contenía la Magna Antología del Folklore Español que recopiló Manuel García Matos y editó Hispavox, hubo unos pocos temas que, allá por los años 60 del siglo pasado, me hicieron reconocer sin ningún género de duda la riqueza de nuestras tradiciones y me animaron —si es que había que animarme— a estudiarlas y difundirlas. Entre esas joyas que desde entonces han constituido para mí la más alta cota del arte popular estaban las grabaciones que Matos hizo en Murcia, en concreto las del Aguilando que tomó en Rincón de Seca y una Salve que los auroros cantaban a San José. De la primera hice una versión que incluí en un LP de canciones de Navidad en el año 1971 y la segunda la grabamos Nacho Sáenz de Tejada, Alex Kirschner y yo en 1973 en un disco que nunca vio la luz en su versión de vinilo porque nos lo prohibió la censura y sólo en épocas recientes pudo hacerse público en edición digital.
Escuchar el canto «Dios te salve, José Justo»
El canto de los auroros, en particular el que dedican las cofradías de diferentes pueblos de la huerta murciana a las advocaciones de la Virgen del Rosario y de la Virgen del Carmen, es impresionante. Llamó la atención desde hace mucho tiempo de todos los investigadores y musicólogos que lo escucharon y sobre todo de aquellos que tuvieron la suerte de oirlo en las "despiertas" con que los cofrades animaban a la gente a sumarse a las procesiones de la aurora llenas de fervor y de entusiasmo. Esa forma de fabordón popular en que una melodía rica en melismas iba acompañando a los textos, generalmente adornada por otra voz en una tercera superior, se veía apoyada por un bajo continuo cuya nota pedal era contestada por otra en una octava alta que entre los auroros se denominaba "la cuarta". El resultado es espectacular, y he tenido el honor de participar y disfrutar de todo ello cuando los días 8 y 9 de octubre fui invitado por la campana de la aurora de la cofradía de Nuestra Señora del Rosario de Javalí Viejo para ser reconocido como Hermano Mayor de honor y asistir a la procesión de la aurora junto a las campanas de Javalí Viejo y Javalí Nuevo, las Torres de Cotillas, Rincón de Seca (campanas del Rosario y del Carmen) y Santa Cruz. Inolvidables momentos y ocasión única para encontrarme rodeado de cariño y de verdadero folklore. Gracias a todos.
Joaquín Díaz