02-03-2010
La tradición, más que una disciplina científica constituye una tendencia estética y vital que basa su existencia en el respeto a la historia y a las formas de vida del pasado, pero que también recibe su principal impulso de nuestra capacidad para evolucionar, renovando ideas y formas de expresión, usos y costumbres. Lejos de formar un conjunto arbitrario de saberes aislados, la tradición se caracteriza por dar homogeneidad a todos esos conocimientos, descubriendo y explicando sus conexiones.
La exposición contuvo textos de Joaquín Díaz sobre fotografías de Juan José Albarrán y piezas del Museo Etnográfico de Castilla y León en Zamora.
LA FIESTA COMÚN
Un lugar de encuentro
1.
Texto:
La fiesta es hoy, probablemente, la celebración colectiva que más significados tiene: reunión, conmemoración, descanso, actividad lúdica, respeto a nuestras raíces, sentimiento.
Foto:
Ritos, p. 57 (Alcaldesa, Peleagonzalo, Zamora)
2.
Foto:
Ritos, p.97 (Hombre de musgo, Béjar, Salamanca)
3.
Texto:
Una dualidad necesaria, con dos fuerzas o principios tan claramente arraigados en el núcleo social como lo antiguo y lo nuevo, el antes y el después, no sólo sirve para marcar el rumbo de una sociedad o la inclinación de sus individuos sino para crear binomios imprescindibles para su equilibrio: pueblo frente a poder, fiesta frente a espectáculo, auge frente a decadencia, mujer frente a hombre, inversión frente a diversión, naturalidad frente a ficción, cultura como parte inalienable de la existencia frente a cultura como derecho social.
Foto:
Ritos, p.147 (San Antón, San Bartolomé de Pinares, Avila)
4.
Texto:
Sería absurdo conservar el patrimonio por obligación, desconociendo qué trascendencia tiene lo que se conserva. Desde el momento en que patrimonio significa "recuerdo de los antepasados" su concepto se amplía para abarcar no sólo monumentos o joyas artísticas sino ideas, formas de vida y joyas del conocimiento.
Foto:
Ritos, p.75 (El obispillo, Burgos)
5.
Texto:
La tradición, más que una disciplina científica constituye una tendencia estética y vital que basa su existencia en el respeto a la historia y a las formas de vida del pasado, pero que también recibe su principal impulso de nuestra capacidad para evolucionar, renovando ideas y formas de expresión, usos y costumbres. Lejos de formar un conjunto arbitrario de saberes aislados, la tradición se caracteriza por dar homogeneidad a todos esos conocimientos, descubriendo y explicando sus conexiones.
Foto:
Ritos, p.110 (Justas, Hospital de Orbigo, León)
NOSOTROS Y LOS OTROS
quiénes somos
-Las creencias
6.
Texto:
Todas las religiones han perseguido como objetivo prioritario la regulación comunal de un razonamiento individual, es decir, responder interiormente a la necesidad de una referencia superior en la vida y en la muerte.
Foto:
Ritos, p.50 (Cofrades, Bercianos, Zamora)
7.
Texto:
Tratando de buscar el origen de las creencias, observaremos que son cuatro las fuentes originales de esos conocimientos, siguiendo el orden que probablemente tuvieron en el proceso del pensamiento humano: el firmamento y los astros, la naturaleza, la magia y la religión.
Foto:
Ritos, p.145 (Hogueras, Navalmanzano, Segovia)
8.
Texto:
En cuanto el individuo se organizó en sociedad surgieron las primeras formas de religión que dictaban normas de comportamiento de acuerdo con un concepto ético o un principio moral.
Foto:
Ritos, p. 17 (Virtud y pecado, La Alberca, Salamanca)
9.
Texto:
Nuestra vida está ordenada por ciclos cuya repetición sirve para medir el tiempo y rememorar circunstancias o aspectos destacados de nuestra propia historia o de nuestras creencias.
Foto:
Fiestas, p. 201 (Ramo. Virgen de la Carballeda, Val de San Lorenzo, León)
10.
Texto:
En la medida en que esa repetición se realice ritualmente (rite=correctamente) nuestra existencia adquiere una dimensión más abierta y refuerza unos pilares básicos para la comprensión del pasado y para la explicación de nuestro comportamiento.
Foto:
Fiestas, p.165 (Fuego. San Pedro Manrique, Soria)
11.
Texto:
De ahí la importancia de conservar costumbres o compartir fiestas cuyo contenido lleve una información complementaria para vincularnos con lo propio y dar sentido a nuestra existencia.
Foto:
Fiestas, p.171 (Rito petitorio, San Juan, Palencia)
12.
Texto:
Nuestra preocupación por la imagen que vamos a ofrecer a quienes nos rodean es proverbial y tan antigua como el mundo o tan natural como el deseo de adornarnos.
Foto:
Ritos, p.86 (Semana Santa, Zamora)
13.
Texto:
No todos los adornos se llevaban por presunción. Muchas joyas tenían un significado mágico y vestir o llevar determinadas piedras o metales daba suerte o protegía de enfermedades, dolencias o del mal de ojo. Pero el adorno, en cualquier caso, es intrínseco al vestido.
Foto:
Fiestas, p.212 (Joyas de la Alberca, Salamanca)
14.
Texto:
La máscara paraliza el tiempo y se convierte en lo eterno, lo que no cambia. Además representa ese aspecto animal, pagano, antiguo, que nos persigue de la cuna hasta la sepultura.
Foto:
Fiestas, p.62 (Toros y guirrios, Velilla, León)
15.
Texto:
A veces los elementos (fuego, aire, agua, tierra), los ritos (celebración, conmemoración) y la forma de vestirnos (traje, disfraz, máscara, joya), marcan la fiesta y la caracterizan.
Foto:
Fiestas, p.223 (Vitor, Mayorga, Valladolid)
16.
Texto:
El juego ha venido a ser un hecho cultural que va adquiriendo una serie de normas o reglas que le convierten también en hecho diferencial. Además de servir para divertirnos y divertir -es decir para jugar uno mismo o para jugar contra o ante otros-, en el juego se producen varias actitudes previas que le dan sentido y hasta origen: la imitación, la representación de primitivas funciones (caza, lucha, etc), la demostración de algo (habilidad, fuerza, etc.), la exhibición y el afán competitivo.
Foto:
Fiestas, p. 143 (Sortija, Pascualcobo, Avila)
17.
Texto:
Una vez que el juego se sujeta a reglas invariables, se producen las demás circunstancias que lo caracterizan: acatamiento de las normas y elección del terreno para practicarlo (aspectos jurídico y religioso), creatividad y desarrollo del juego (aspectos antropológico y costumbrista) y premio u honor a conseguir (aspecto social y de relación).
Foto:
Fiestas, p.162 (Encierros, Cuellar, Segovia)
18.
Texto:
Es rara la fiesta, el rito o el juego que no acaban en una comida colectiva en la que se comparte historia y alimento. En la fiesta de la "pinochada", donde las mujeres celebran la leyenda de que vencieron a los moros a ramazos, se acaba con una caldereta.
Foto:
Fiestas, p.186 (Pinochada, Vinuesa, Soria)
19.
La relación
Texto:
En el universo de la tradición se percibe claramente una extraordinaria actividad, particularmente en los oficios: un sistema de vida más autónomo y menos dependiente de productos elaborados fuera del pueblo daba como resultado una enorme variedad de quehaceres y una auténtica autogestión.
Foto:
Fiestas, p.233
Piezas:
Tijeras de esquilar, Tarja, Romana, Cayado tallado, Cestos de vendimia
Grabados:
Reyes,
Feria de San Juan,
Mercado Salamanca,
Viático templo,
Sastre a domicilio,
Plaza del azoguejo,
Plaza de toros
Texto:
De esa misma actividad se derivaba un riquísimo vocabulario que hoy desgraciadamente se ha reducido al perderse su uso o limitarse su creación. Tal entramado de ocupaciones originaba además una vida de relación personal, profesional e intergeneracional, que estaba regulada por un derecho consuetudinario cuyas normas, antiguas y contrastadas, eran respetadas por todos.
Piezas:
Vara de cofradía,
Panes de ofrenda,
Contrato de trabajo,
Cánticos de misión,
¿Mantilla para cubrir a los velados?
Desde que en el siglo XVI el individuo empieza a ser protagonista de la historia y de su expresión a través del retrato, innumerables artistas dedican su atención a la figura humana pero también a los ámbitos en los que aquel mismo individuo vive y se relaciona.
Grabado:
Vendedores
Frente a la aldea global que hoy se nos propone (y a veces se nos impone) dotada de un lenguaje escaso y técnico, los individuos de generaciones pretéritas se constituían en el centro del universo y se expresaban con léxicos abundantes y creativos.
Grabado:
Ciego y aleluya de provincias de España
LA MENTALIDAD
Qué pensamos
20.
Texto:
Pagano viene de pagus (que en latín significaba tierra), por eso los primeros cristianos llamaban paganos a los rústicos que seguían aferrados a antiguas costumbres y a los dioses del campo. No es extraño, por tanto, que todo lo pagano estuviese entroncado con celebraciones en honor de elementos naturales como el agua, el fuego o la misma tierra que permitían o condicionaban el crecimiento de las cosechas -por tanto el alimento y la futura siembra-.
Foto:
Fiestas, p. 205 (Hoguera, Tordesillas, Valladolid)
21.
Texto:
Era muy frecuente para la fiesta del Corpus Christi, que se pusiera en escena un Auto Sacramental o pieza dramática similar, con la intervención de personajes bíblicos o de virtudes y vicios encarnados. Las representaciones del mal (cabezudos, botargas, birrios, cachidiablos) terminaban postrándose ante el Señor en la custodia, aunque previamente hubiesen perseguido a la gente o realizado actos mágicos, como el de saltar sobre los niños nacidos en el año.
Foto:
Fiestas, p.126 (Colacho, Castrillo de Murcia, Burgos)
22.
Texto:
Peñas o quintos se encargaron casi hasta hoy de plantar el mayo, de rematarlo con "el empalme" o chopo que se colocaba en la parte más alta del pino para darlo más altura, y de adornarlo con objetos que los mozos trataban de alcanzar como si fuesen frutos o piñas de inestimable riqueza.
Foto:
Ritos, p. 123 (Mayo y quintos, Navalosa, Avila)
23.
Texto:
Los mozos se encargaban de preparar los ritos de paso que todavía hoy convierten a los niños en adolescentes, mientras las mozas tomaban a su cargo la tarea de explicar lo mejor que podían a las niñas que hubiesen tenido la primera menstruación, que ya habían entrado en la "cofradía de la costumbre".
Foto:
Ritos, p.93 (Niña en el Vitor, San Esteban del Valle, Avila)
24.
Texto:
La mentalidad es la cultura y modo de pensar que una persona adquiere al contacto con su familia y con el grupo humano que le rodea. Cuando esa cultura le caracteriza frente a otros, le confiere una identidad. Hay un tipo de identidad "natural", procedente de la acumulación de valores éticos y estéticos, que se va formando en una comunidad a lo largo de su historia, y hay otra especie en la que, con todas esas cualidades, se construye un modelo de comportamiento colectivo, algo así como un espejo en el que nos reconocemos y nos reconocen los demás.
Foto:
Ritos, p.37 (Andera, Salamanca)
25.
Texto:
Los birrias, payones, chiborras, zarragones, etc, son personajes a los que se les han atribuido diferentes simbolismos que van desde el demoníaco hasta el bufonesco pasando por el taumatúrgico o por el hierático. Van por libre y suelen ejecutar saltos y cabriolas para asustar a la concurrencia, tras de la cual emprenden, de vez en cuando, veloz carrera para atizar, aquí y allá, golpes con una vejiga, un ovillo de lana, unas tiras de cuero, una especie de tridente o unas tenazas sujetas al extremo de un palo. Suelen ser personajes de antruejo o carnaval y están unidos a ritos de inversión.
Foto:
Ritos, p.22 (Diablo, Sarracín de Aliste, Zamora)
26.
Texto:
Las romerías son reminiscencias de las antiguas peregrinaciones realizadas a un lugar sagrado en cuyos desplazamientos se buscaba un perfeccionamiento interior y la salud del cuerpo.
Foto:
Fiestas, p.145 (Romeria, Fuentelcésped, Burgos)
27.
Texto:
Todas las religiones han perseguido como objetivo prioritario la regulación en común de un razonamiento individual, como es el de responder interiormente a la necesidad de una referencia superior en la vida y en la muerte.
Foto:
Ritos, p.92 (Difuntos, Pascualcobo, Avila)
28.
El agua es símbolo de purificación por lustración y así lo confirman la ceremonia cristiana del bautismo o las creencias que todavía subsisten acerca del poder limpiador de las aguas en determinadas fechas del año. Desde tiempos remotos se consideró la posibilidad de que existieran dos ámbitos -el mundo y el inframundo- en los que las aguas (de vida en el primer caso y amargas en el segundo) se comportaban de modo diferente y proporcionaban bien o mal, según el caso lo propiciara.
Foto:
Ritos, p.99 (La Granja, Segovia)
29.
Texto:
Las banderas y pendones comenzaron siendo un símbolo representativo de personas que querían mostrar en el campo de batalla los signos que les identificaban (colores, animales, castillos, árboles, estrellas), para terminar siendo un símbolo diferenciador de ciudades, regiones o países con las características que les eran propias. En muchos pueblos los pendones, que representaban a todos los vecinos, se guardaban en la iglesia pues se usaban tanto en procesiones cívicas como religiosas.
Foto:
Ritos, p. 105 (Pendones, San Juan de Ortega, Burgos)
Texto:
30.
Texto:
La cruz, convertida por el cristianismo en un símbolo de fe y de salvación, fue siempre además un signo que nos acompañaba en muchas circunstancias de la vida, aunque no lo percibiésemos: una encrucijada, un cruce, una marca, un signo aritmético, un lugar en el espacio.
Foto:
Ritos, p.112 (Penitente, Salvatierra, Salamanca)
31.
Texto:
En la antigua Grecia, cuando un huésped abandonaba la casa en la que había estado acogido, el dueño le entregaba un trozo de cerámica, un símbolo, para que fuese reconocido en la casa a la siguiente ocasión en que volviera. La palabra símbolo, pues, es algo que se comparte porque se conoce su significado y su mensaje. El mal, por ejemplo, cuando está encarnado en personajes como Judas, o lo inútil y superfluo cuando está representado por muñecos como el pelele.
Foto:
Ritos, p.135 (Pelele, Zamarramala, Segovia)
32.
Texto:
El gusto por las representaciones en las ciudades y en el medio rural se mantuvo en unos niveles populares hasta la construcción de los teatros románticos en el siglo XIX. Muchas obras del Renacimiento y del Barroco llegaron a nuestros días gracias a los aficionados que las representaban con una peculiar "profesionalidad".
Foto:
Ritos, p. 29 (La loa, La Alberca, Salamanca)
33.
Texto:
Las representaciones de la Pasión llenan el tiempo de la Cuaresma y la Semana Santa en muchos lugares de Castilla y León. El Viernes Santo, especialmente en aquellos lugares en que la Venerable Orden Tercera de San Francisco tuvo mucha implantación, se llevaba a cabo la función del Descendimiento, costumbre que ha llegado hasta nuestros días y que se realizaba con una imagen articulada de Cristo, la cual se iba desclavando cuidadosa y devotamente de la Cruz para colocarla en una urna que hacía las veces de sepulcro.
Foto:
Ritos, p.100 (Descendimiento, Bercianos, Zamora)
34.
Texto:
Los gigantones, que primero fueron monstruos o seres terribles para pasar después a representar a moros, turcos y gigantes de países exóticos que se rendían ante el Santísimo, se convirtieron finalmente en reyes y reinas que daban ejemplo de sumisión al Monarca de monarcas. Junto a ellos, los enanos o cabezudos, prohibidos como sus enormes acompañantes por Carlos III en 1780, encarnaban la fealdad y monstruosidad rendida, asimismo, ante el rey de la creación.
Foto:
Fiestas, p.175 (Gigantones, Burgos)
NUESTRO ENTORNO
Dónde vivimos
35.
Texto:
El entorno en el que el ser humano desarrolla su vida tiene dos ámbitos distintos en los que se desenvuelve con diversa fortuna y con los que mantiene una relación directa y vital. En primer lugar está el cielo, ese espacio inmenso situado sobre nuestras cabezas que contiene los astros (sol, luna, estrellas, planetas) y en el que se generan los meteoros (el viento, la lluvia, el frío, la nieve, el calor), además el cielo es el ámbito en el que la religión cristiana situó a Dios y cuya inabarcable extensión estaba surcada por un camino llamado vía láctea que tenía en la tierra un reflejo denominado camino de Santiago.
Foto:
Ritos, p.55 (San Frutos, Segovia)
36.
Texto:
En segundo lugar estaba la tierra, el suelo, sobre cuya superficie se sembraba y se cosechaba, pero que además estaba surcada por multitud de venas de agua de las que bebían y vivían los animales, las plantas y las personas. Bajo esa tierra situaban los antiguos un mundo oscuro, atravesado por túneles y habitado por seres habitualmente maléficos, y allí vinieron los cristianos a colocar el infierno.
37.
Texto:
La naturaleza
Hay, desde hace siglos, una tradición persistente: el árbol, símbolo de la vida en la tierra, está protegido -al igual que las aguas, que son otra fuente de la existencia- por uno de esos seres terribles o malévolos que pretendía defender su integridad. Ese ser aparece idealizado en muchas representaciones antiguas y como tal lo idealiza interiormente a través de la historia el propio ser humano para quien -aunque sólo sea en sueños- el árbol llega a significar su misma existencia. No es extraño, pues, que las religiones antiguas hicieran del bosque un lugar lleno de misterios y propicio para el culto, y menos extraño aún que enigmas, miedos y ensueños se encerrasen en él con arcana insistencia. Quien se adentraba en el bosque se exponía a descubrir los secretos de la vida con todas sus consecuencias.
Grabados del árbol
Foto:
Fiestas, p.107 (Pascualcobo, Avila)
Los animales
Como parte integrante de la naturaleza y más o menos cercanos al entorno del individuo, los animales son a veces compañeros y a veces adversarios con los que aquél debe convivir o a los que debe respetar por miedo o por sentido común. Desde los más antiguos relatos hay un interés por demostrar que los animales son inferiores al hombre pero, al mismo tiempo, aparecen aquí y allá vestigios de cuentos y leyendas en los que las metamorfosis ofrecen un curioso campo de observación, pues en ellos el hombre se transforma en animal con tanta asiduidad como el lobo o el oso hablan y actúan al estilo de los seres humanos.
Grabados de animales
Foto:
Fiestas, p.57 (Llamas de la Ribera, León)
38.
Texto:
El tiempo: Desde la mitología griega, Saturno es la personificación del Tiempo, casi siempre con los mismos atributos y la vana obsesión de medir el paso de las horas con un reloj de arena.
Grabado:
El zodíaco y los horóscopos. Desde los sacerdotes y astrónomos de Babilonia que mezclaron la ciencia y la religión hasta los horóscopos actuales de las revistas hay una evolución pero el mismo y vano deseo de adivinar el futuro. La Iglesia, pese a que muchos de los herejes condenados por ella fueron astrólogos, no pudo o no quiso acabar con costumbres y cálculos antiquísimos que relacionaban al ser humano con los asterismos o doce constelaciones del Zodíaco.
Grabado:
Las antiguas civilizaciones seguían la teoría de que todo en la tierra estaba sujeto a cuatro elementos que tenían sus correspondientes cualidades: al fuego y al aire correspondían el calor y la frialdad, que eran cualidades activas, y al agua y tierra iban unidas humedad y sequedad, que eran pasivas.
Grabado:
La medicina ha estado vinculada a la astrología desde la más remota antigüedad. La noción del hombre como microcosmos regido por las mismas leyes que gobiernan el macrocosmos o universo, y en el que se reproducen en pequeño las mismas dinámicas que mantienen la armonía de las esferas celestes, llevó a atribuir a cada signo zodiacal y a cada planeta una influencia directa sobre una determinada parte del cuerpo humano.
Grabado:
40.
Recordar es revivir
Texto:
Aún perdura hoy -si bien ligeramente modificada ya-, la idea de que el fundamento de la cultura es la memoria, y tal vez el fundamento más importante pues gracias a ella, de forma mediata o inmediata, han llegado hasta nosotros los elementos que nos permiten reconocernos e identificarnos frente a quienes nos rodean.
Foto:
Fiestas, p.137 (Hospital de Orbigo, León)
Texto:
Antes de que los antiguos designaran a Mnemosina como la musa protectora de la memoria, su hermana Polimnia ya presidía los himnos y cantos en honor de los dioses y de los héroes. Según la tradición, Polimnia tenía la facultad de aprender y de recordar, por eso se la representaba en actitud de reflexión. Su emblema era una mano tirando de una oreja, lo cual significaba la primitiva costumbre de dar un tirón de orejas al que había olvidado algo.
Grabado
Foto:
Fiestas, 179 (Castrillo de los Polvazares, León)
Texto:
En esa memoria donde se asientan todas las antiguas creencias y en su evolución se podrían distinguir tres mundos o estilos (manual, oral y escrito) que responden no sólo a tres diferentes modos de expresión a través del espacio y el tiempo, sino a tres aspectos distintos de un mismo hecho, el lenguaje, que ha ido elaborando sus reglas lentamente a lo largo de la historia.
Foto:
Fiestas, p. (Lanzahita, Avila)
CUBRIR LA DESNUDEZ
A partir de la Biblia el ser humano hizo de su cuerpo desnudo un tabú pero también un motivo para combinar naturaleza y cultura siguiendo la actitud del propio Yavé que quiso cubrir a Eva y Adán con pieles de animales: el primer acto con el que un recién nacido entra a formar parte de la civilización a la que va a pertenecer es el de ser ataviado con gorro, ropones, faldones y mantillas. Y así seguiremos hasta la muerte en que, antes de volver a la tierra, seremos amortajados para ir cubiertos con un sudario al encuentro con Atropos, la parca que va a cortar el hilo de nuestra vida.
EL ATUENDO Y EL GUSTO
Desde los tiempos más remotos, una de las actividades que relacionaron al ser humano con la naturaleza que le rodeaba, fue la de buscar elementos que le sirvieran para cubrirse. Primero, con pieles de los animales a los que mataba para alimentarse. Después con productos obtenidos de la tierra y elaborados con un proceso más o menos largo y costoso. De la necesidad hizo virtud y comenzó a mejorar el talle y los colores. Aprendió a coser y ensamblar las partes de los vestidos, así como a teñir y abatanar para mejorar el aspecto y la suavidad de los materiales empleados. Todo ello combinado con otros factores que le servían para personalizar sus gustos o para integrarle en sociedades gremiales.
LOS ANIMALES
Uno de los defectos que caracteriza al ser humano y que le diferencia de otras especies, es el egoísmo. Invocando perentorias necesidades el individuo fue capturando y domesticando animales para su propio provecho. En unos casos porque extraía de ellos beneficios directos o indirectos: de la vaca sacaba leche y asimismo le servía para arar, por ejemplo, de las palomas tomaba los pichones y usaba la palomina como abono, los cerdos le ayudaban a reciclar las sobras de alimentos y además le ofrecían el máximo de aprovechamiento. En otros casos porque le defendían de especies más molestas (el caso de perros y gatos que impedían que lobos o ratones invadieran el territorio "humano" o sus aledaños). También a veces por la admiración que despertaba su canto: recordemos los cuentos sobre el canto mágico de ruiseñores y otras especies a los que algún poderoso trataba de encerrar en una jaula para que cantasen sólo para él. Es curioso el deseo humano de que esos animales, más o menos sometidos, pertenecieran al grupo familiar para lo que incluso se les bendecía y se les llevaba a la iglesia, habiéndoseles asignado desde tiempos remotos patronazgos de lujo como los de San Antón o San Francisco, quienes, según relatos legendarios, convivieron con algunos animales o los trataron como a personas.
LOS OFICIOS
En el terreno individual, la dedicación de cada persona a un oficio no sólo sirvió para identificarle ante los demás -en los siglos medios le daba apellido y más tarde le hacía diferenciarse por su indumentaria- sino que le obligó a familiarizarse con unas herramientas y un vocabulario a cuyo perfeccionamiento se entregó generación tras generación. Actividades comunes como las agropecuarias (labradores, pastores, vendimiadores y bodegueros) se combinaban así con otras más particulares como las derivadas del monte (resineros, piñeros, cisqueros) o las ocupaciones auxiliares (carpinteros, cuberos, carreteros, alfareros, herreros, guarnicioneros) cuya importancia fue debilitándose en la medida que la vida rural se transformó al modernizarse la tecnología.