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Revista de Folklore número

061



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EL RAMO DE NOCHEBUENA
(Versión recogida en Siero de la Reina, zona noreste de León)

FUENTE FERNANDEZ, Francisco Javier

Publicado en el año 1986 en la Revista de Folklore número 61 - sumario >



INTRODUCCION

El texto que a continuación se va a estudiar y editar por primera vez fue recogido en Siero de la Reina, zona noreste de la provincia de León. Llegó a mis manos de forma casual en el mes de agosto de 1985, y digo casual, ya que en ese momento me encontraba grabando romances en casa de doña Petra Fuente...cuando la conversación derivó hacía los cantares religiosos del municipio. En el repaso que hacíamos a éstos apareció El Ramo de Nochebuena, texto al que ya daba por perdido en este lugar; las personas de más edad que habían sido consultadas no recordaban el texto, aunque si tenían conocimiento de la ceremonia. Tal es así que doña Petra es la única que conserva en el pueblo (en pueblos adyacentes existen otras versiones) el texto en su importantísimo caudal memorístico de literatura tradicional oral. No es de extrañar, porque la recitadora proviene de la familia con mayor abolengo en este campo. Ella recuerda a sus antepasados como familia de recitadores y cantores de la tradición.

Una vez escuchado el texto, doña Petra se ofreció amablemente a transcribirmelo y hete aquí que me encuentro ante él con una triple intención: dar a conocer el texto y la ceremonia a que corresponde, preservarlo de las garras del olvido que está acabando con parte de la tradición popular y realizar un ensayo interpretativo del poema.

Dado que la orientación que voy a imprimir al ensayo va a ser estructural, conviene aclarar que se tratarán aspectos como la descripción de la ceremonia, análisis del contenido, de la estructura, los personajes, entre otros.

La bibliografía especifica sobre los ramos de Navidad es muy escasa y fragmentaria; no obstante, merecen especial atención los trabajos de Fernández Oxeo, Casado Lobato y Alonso Ponga (1).

Y para no cansar de antemano al lector, dejemos los prolegómenos y ofrezcámosle el texto, texto que por el tema se sumerge en el ciclo .navideño, emparienta con la pastorada, autos de Navidad, etc., aunque sea mucho más breve que éstos: Sólo 108 versos cantados en la Misa del Gallo. ¡Que pase el poema!

TEXTO

Gracias a Dios que ya viene
ese señor sacerdote,
el que la misa nos dice
a las doce de la noche.

Tomemos agua bendita 5
que nos sirva de escalera
para subir a los cielos
a ver la sagrada Reina.

Nos santiguamos todos,
la Trinidad invocando, 10
en el nombre del Padre
y del Hijo y del Espíritu Santo.

Apártense los señores,
déjennos paso y entrada,
que vamos a visitar 15
a María Inmaculada,

y a darla los buenos días,
que habrá venido cansada,
que ha sido largo el camino,
cinco días de jornada. 20

Camina la Virgen pura
con su esposo y dueño amado
hasta llegar a Belén
el día de veinticuatro.

El día de diecinueve, 25
según la historia lo expresa,
salieron de Nazaret
dejando casa y pobreza,

hasta llegar a Belén
que es una ciudad muy bella, 30
donde los ángeles cantan
y el Niño de Dios se alegra.

Fue San José a la ciudad
Y a la ciudad dio la vuelta
y entre amigos y parientes 35
la posada se la niegan.

Se vuelve para su esposa,
le dice de esta manera,:
-"Sabrás, esposa del alma,
que posada no se encuentra". 40

Y la Virgen le responde:
-" Por eso no tengas pena,
que aquí ha de haber un portal
por no estar a la clemencia".

Se acercaron al portal, 45
aunque sin luces de cera,
fueron tantos los divinos
que a todos les dieron cuenta.

Determinan de cenar
de aquella vianda y pobreza, 50
que es pan y un poco pescado,
que se gastaba en la tierra.

Y después de haber cenado
a Dios las gracias le dieron,
y en medio de esas razones 55
las doce en punto ya dieron,

cuando la Virgen María,
aquella sagrada reina,
dio a luz un hermoso niño,
rey de los cielos y tierra. 60

Consideren los oyentes
la pobreza de María
que ni unos tristes pañales
tan siquiera no tenía.

Aquella humilde señora 65
su misma toca partía
para envolver al infante
que de oro parecía.

Ya bajaron los pastores
de todas las comarquías 70
a ofrecerla ciertos dones
y hasta traerla mantillas.

Las doncellas que habitaban
en tan altas serranías
determinan de bajar 75
a ver la Virgen María:

-" Aquí tienes, Virgen santa,
estas preciosas alhajas
para que hagas a tu hijo
unas muy lucidas fajas". 80

Apártense los señores,
si se quieren apartar,
que va el ramo con sus flores
a las gradas del altar.

Levántate mayordoma 85
con mucha serenidad
y de parte de las mozas
lleva ese ramo al altar.

Las manzanas que traemos
en este lucido ramo 90
son para don Emiliano (2)
que dice Misa de Gallo.

El que la misa nos dijo
con toditos sus modales,
un ángel nos pareció 95
de los cielos celestiales.

El que la misa nos dijo
a las doce de la noche
nos pareció que era un ángel
y era el señor sacerdote. 100

Quédate con Dios, María,
la del rostro cristalino,
échanos la bendición
que nos vamos de camino.

Quédate con Dios, María, 105
esposa de San José,
que hasta la misa del día
no te volvemos a ver.

DESCRIPCION DE LA CEREMONIA

El Ramo de Nochebuena hace referencia a la ceremonia religiosa de tipo popular que se desarrollaba en la Misa del Gallo el día 24 de diciembre. Las vísperas, las mozas de la localidad acudían a casa de la "mayordoma" (cargo que consistía en llevar el cuidado y preparación de los altares menores) donde adornaban el ramo y ensayaban los versos que debían cantar.

El ramo era un triángulo de madera, con unas tablillas sobresalientes colocadas en los catetos, forradas con encaje y alrededor una puntilla bien almidonada y plisada que sobresalía unos seis dedos (sic). En medio de estas tablas laterales aparecen las velas (unas quince), y la parte inferior de la hipotenusa aparece engalanada con manzanas colgando. Toda la madera del triángulo estaba forrada con lienzo y sobre éste se cosían puntillas y adornos con rosas de papel y estrellas. En el centro, por un lado, un paño de color rosa y otro, en el lado opuesto, de color azul; sobre ellos se colocaba un encaje de color transparente y por un lado, con una cinta azul, se formaba una M (María). Este triángulo aparece unido a un mango, que servirá de soporte para llevarlo, mango que se introducirá en un tronco de madera mientras la ceremonia. Concluida ésta, el ramo permanece en la iglesia hasta el día siete de enero en que se desmantela, junto con la "casina". La mayordoma recoge todos los adornos y los guarda para el año siguiente; la madera es retirada a .la oscuridad de la sacristía.

Como se podrá observar, esto tiene muy poco que ver con un ramo vegetal, con lo que sugiere la palabra ramo; por eso Concha Casado dice que:

"El ramo, en un principio, era simplemente una rama de árbol; luego esa rama se fue adornando con cintas, flores, velas, rosquillas, frutas, etc. Estos elementos decorativos pasan después a ser algo esencial, y el ramo vegetal desaparece para convertirse en ramo artificial -en un armazón de tablas- que se cubría y adornaba, transformándose así en un simple soporte de las ofrendas y quedando de él solamente el nombre" (3).

El ramo era portado por la moza mayor del pueblo, escoltada por el coro del resto de las mozas. Una vez en el patio de la iglesia, se esperaba la llegada del sacerdote que abría las puertas y se comenzaba a cantar formando dos coros: unas cantaban un verso y otras el siguiente. Se cantaba hasta el v. 80, a la vez que se penetraba en el interior de la iglesia, colocándose en la parte delantera, mientras los pastores hacían la ofrenda. Comenzaba la misa y al ofertorio se cantaba hasta el v. 92. Mientras tanto, la mayordoma llevaba el ramo hasta el altar, se arrodillaba y el señor cura le daba la bendición. El ramo permanece aquí hasta terminar la misa; concluida ésta, el coro canta la despedida, vv.93-104. Al salir, el pueblo se concentra en las casas, agrupándose por familias, para comer el "morcillón" y celebrar la velada de Nochebuena.

Esta singular y preciosa ceremonia fue suprimida en la década de los cuarenta en Siero de la Reina por el sacerdote riañense Eusebio Ortiz, a quien se debe la eliminación de buena parte de las costumbres populares religiosas o no, en un enfrentamiento continuado con el pueblo. Contrasta esta postura con la defensa que, siete siglos antes, hacia Alfonso X de estas costumbres populares:

"Pero representacion ay que pueden los clerigos fazer, asi como de la nascencia de Nuestro Señor Jesu Christo, en que muestra como el angel vino a los pastores e como les dixo como era Jesu Christo nacido (...) tales cosas como estas que mueven al ome a fazer bien e a aver devocion en la fe, pueden las fazer" (4).

AUTOR Y AMBITO GEOGRAFICO

El poema es de carácter anónimo; ahora bien, habría que suponer en su origen un creador individual, probablemente un clérigo por la presencia de cultismos como "que nos sirva de escalera" (v. 75), “fueron tantos los divinos" (v. 47), "determinan" (v. 75), el hipérbaton de la parte central del relato, así como el acudir a la historia (v. 26) para justificar la datación de los cinco días que es ahistórica; esto último nos recuerda a procedimientos de Berceo o Don Juan Manuel. Una vez creada la obra, la entregará al pueblo, pasando su autor al anonimato (rasgo típicamente medieval) y convirtiéndose la colectividad en el autor-transmisor. Desde ese momento el texto ha rodado en la tradición oral que de forma fehaciente se puede constatar a comienzos del siglo XIX aunque se le pueda atribuir una datación más antigua quizá medieval o renacentista. La pérdida de tales textos ha de deberse -como Donovan supone- a que quizá nunca se escribieron: su transmisión, en muchísimos casos, debió de realizarse sólo por vía oral. Los autos navideños que actualmente se representan en zonas arcaizantes y conservadoras de León, poseen, con toda seguridad, este remoto origen" (5).

La recitadora ha sido Petra Fuente, de 61 años de edad, natural de Siero de la Reina (León), quien aprendió el texto de su abuela y ésta, a su vez, de su madre, según testimonio de la interesada. Era una familia de gran tradición recitadora oral como lo atestigua el sin par repertorio de más de sesenta textos de doña Petra.

El ámbito geográfico, conocido por mi, se encuentra ubicado en las cabeceras del Esla y Cea, en el noreste de la provincia de León. Tengo versiones, además de la de Siero, de Pedrosa del Rey y Burón, así como conocimiento de la ceremonia en otras poblaciones. Parece lógico que esta ceremonia tenga el ámbito mucho más amplio. Esperemos que el desconocimiento que nos embarga sea desvelado por el estudio que está realizando el compañero Joaquín serrano, ya que "los ramos no son exclusivos de la región leonesa, se encuentran en casi toda España y con especial vitalidad aún en Galicia y Asturias" (6).

Lo que no cabe duda, es que este género está enclavado en el neotradicionalismo pidaliano (7), que es una parte del acervo del pueblo y que, de no ser recogido inmediatamente, caerá en el olvido como tiende a caer el romancero oral (mucho más fuerte y extendido), bien por los cambios sociales tan profundos, bien por la falta de rodrigón del texto escrito, ya sea pliego impreso o manuscrito.

CONTENIDO NARRATIVO

El contenido narrativo forma parte de un amplio tema, el de Navidad, que estaría integrado por diversos géneros como el villancico, la pastorada, autos de Navidad...y El Ramo. Este posee fuentes claras, las mismas de la pastorada, es decir, el Evangelio de San Lucas (8). La información que aporta el evangelio es conocida de todos: se refiere al traslado de María y José desde Nazaret a Belén, la búsqueda de posada, el nacimiento del Niño y la ofrenda de los pastores. Dicha información se complementa con otra que es espúrea, como los cinco días de duración del viaje, el cifrar la negación de la posada en los parientes y amigos, la cena y sus viandas (pan y pescado), el partir la toca para hacer pañales, etc. Estos elementos añadidos contribuyen a dar mayor dramatismo al texto, lo hacen más real. Todo el contenido anterior aparece enmarcado por la historia del ramo. En él aparecen las manzanas cuya presencia puede sorprender a quien no conozca la zona y el carácter de literatura abierta de estos textos. La elección de esta fruta, como ofrecimiento al sacerdote, posee su explicación en que en este pueblo y en esta época la única fruta que se conservaba era la manzana de la tierra, de recogida tardía y conservada en la panera de centeno para las grandes solemnidades familiares, como la matanza del cerdo o las fiestas navideñas.

ESTRUCTURA

El texto es un pequeño poema narrativo de 108 versos, con una trama argumental muy sencilla. Hace referencia a una de las numerosas representaciones religiosas, típicamente populares, que otrora se celebraban en la iglesia y que en la actualidad han sido depuradas, consistente en la visita que la parte más representativa del pueblo, por ser ceremonia cantada, las mozas, hace a la Virgen en la Misa de Gallo para saludarla y asistir a su alumbramiento.

Estructuralmente el poema nos recuerda los cuentos de Don Juan Manuel (9) en los que se contaba una historia que funcionaba como marco o encuadre de la principal. Así, nuestro relato se puede dividir en tres partes generales.

El verso uno al veinte se convierte en la introducción que presenta la ceremonia que se va a celebrar, la entrada en la iglesia y la finalidad; es la primera parte del marco. Sigue la parte nucleica del texto (vv. 21-80), el relato del nacimiento, historia principal, para pasar al ofrecimiento del ramo (vv. 18-100) y terminar con la despedida (vv.101-108), subnúcleos que constituyen la segunda parte del encuadre.

Tomando en consideración lo anteriormente expuesto, el discurso narrativo podría quedar esquematizado así :

1. Marco.

1.1. "Deo gratias" por la llegada del sacerdote para celebrar la Misa de Gallo (vv. 1-4).

1.2. Toma de agua bendita y señal de la cruz (vv. 5-12).

1.3. Finalidad de la ceremonia: visitar a María (vv. 13-20).

2. Historia del nacimiento.

2.1. Partida de Nazaret y llegada a Belén (vv. 21-32).

2.2. Negación de la posada (vv. 33-44).

2.3. En el portal:

2.3.1. Cena (vv. 49-52).

2.3.2. Nacimiento (vv. 53-60).

2.3.3. María empaña al Niño (vv. 6968).

3. Marco.

3.1. Ofrecimiento del ramo al sacerdote (vv. 81-100).

3.2. Despedida (vv. 100-108).

Así pues, se puede observar cómo el poema forma una estructura de tipo concéntrico, donde las historias narradas corresponden a estructuras de tipo alfa, en la terminología de Di Stefano, con presentación, nudo y desenlace, a través de una linealidad en el tiempo.

EL NARRADOR

La primera persona del plural, correspondiente al grupo de mozas portadoras del ramo y cantoras del poema, es el narrador. Es pues, un narrador-personaje. Por lo que respecta a su grado de conocimiento, se puede decir que es el omnisciente, por los datos que aporta, por la selección que se realiza, comportándose como un demiurgo que conoce todo y aporta lo que al público y al interés del relato interesa, obviando el resto. A él corresponden noventa y uno de los cíen versos y solamente nueve al estilo directo: diálogo entre San José y la Virgen y ofrecimiento de las doncellas-pastoras. Por otra parte, el punto de vista es favorable al relato y a la situación; evidencian esta predisposición los calificativos: "señor sacerdote" (v. 2), "que habrá venido cansada" (v. 58), "hermoso niño" (v. 59), "que es una ciudad muy bella" (v. 30), "aquella sagrada reina" (v. 58), etc. Será un elemento más que habrá que tener en cuenta para la atribución del poema a una fuente clerical (10) .

LOS PERSONAJES

Siete son los personajes que estructuran el relato, pero no todos están en el mismo plano. El sacerdote, que aparece al comienzo y al final, y el ramo se encuentran en el campo de los personajes fugaces, secundarios, del marco. En la historia principal los ángeles son fugaces, mientras que los pastores son adjuntos que aparecen siempre en este tipo de relatos. Tres protagonistas aparecen: el nosotros, como actores de la historia externa que enmarca el relato central, y la Virgen y San José en la historia fundamental. El Niño se comporta como sujeto pasivo, por tanto secundario y adjunto de los protagonistas.

Todos los personajes aparecen introducidos en el discurso de forma directa por el narrador. Esto no conlleva, como podría parecer, la descripción completa, ya que casi no se ofrecen datos físicos y muy escasos de índole psíquica. Se les podría considerar en la clasificación de Forster como planos. El sacerdote aparece definido por su cometido, "el que la misa nos dice" (v. 4), y comparado con un ángel (v. 91 ). Del "nosotros" sólo podemos deducir que es católico por la toma de agua bendita (v. 5), la señal de la cruz (v. 9), la asistencia a la misa (v. 3), etc. De María se nos ofrece su pobreza (en varias ocasiones), su condición de reina (v. 58), esposa de San José (v. 98), y un rasgo físico: "la del rostro cristalino" (v. 94); la descripción física sólo aparece en otro personaje, pero también mínima: al Niño se le califica de "hermoso" (v. 59), además de "rey" (v. 60). La condición de esposo es la única característica que define a San José (v. 37 ).

Este breve análisis nos conduce a dos evidencias: que el personaje central es la Virgen por ser de ella de quien más información se nos ofrece y que la caracterización física es irrelevante; en general la caracterización es poco importante, porque lo preferente reside en el acontecimiento central: ofrecimiento del ramo y nacimiento de Jesús.

EL TIEMPO

El desarrollo de la intriga coincide con el cronológico-lógico de la fábula (los términos están utilizados en el sentido que Diego Catalán les da). El desarrollo temporal se produce en línea recta, aunque habría que señalar que la historia-marco se interrumpe en el verso ochenta para dar paso a la celebración de la misa y que una vez acabada ésta continúa a partir del verso ochenta y uno.

En un análisis pormenorizado de las formas verbales podemos llegar a los siguientes resultados: 1) predominio del modo indicativo (67,56% de las formas) que revela el deseo de objetividad del narrador, presentar los hechos tal cual sucedieron, en definitiva, el intento de presentar el relato como real, como verdadero; 2) escasa incidencia del subjuntivo, dos formas, siendo necesario destacar que una de ellas, "hagas" (v. 79), posee valor de futuro; 3) aparición de ocho formas de imperativo, cinco con referencia directa al público para hacerle partícipe del relato, llamarle la atención, implicarle, y otras tres dirigidas a la Virgen para hacer más verídico el relato, más familiar, más presente; se intenta un diálogo que no puede existir en un proceso de comunicación unilateral; 4) el tiempo verbal que predomina es el presente (55,40 % ), ya que para captar y mantener la atención del receptor no existe nada mejor que presentar los hechos cercanos a él, introduciéndolo en el desarrollo, si no como protagonista, sí como observador; 5) los imperfectos aparecen en los momentos descriptivos y como éstos son pocos, escasos serán estos tiempos (siete en total); no obstante, la alternancia del presente con el imperfecto sirve para que el público se mueva constantemente entre el pasado y el presente, convirtiéndose éste en un recurso más de llamada de atención; 6) el paso de un acontecimiento a otro, el progreso de la narración se produce con el uso del indefinido que aparece en doce ocasiones entre el verso veintisiete y el noventa y uno; 7) por último, reseñar el valor desplazado del futuro "sabrás" (v. 39) que aparece trasladado al presente y que se convierte en expresión de respeto, de cortesía, de San José hacia su esposa en el difícil momento de comunicarle que la posada les ha sido negada. En síntesis, las formas verbales reflejan el deseo de objetividad del narrador, el intento de presentar la fábula como presente y el deseo de implicar y hacer partícipe de la ceremonia al público. Es lo que se llama adecuación perfecta entre la forma y el contenido.

METRICA

El poema está compuesto en el verso más tradicional y popular (ambos conceptos en sentido pidaliano) de nuestra literatura española, el octosílabo, aunque se deba añadir que dos anomalías se registran: el verso once consta de siete sílabas y el doce de doce; estas imperfecciones son características de la poesía archivada del pueblo y que el rodar de los tiempos no logra subsanar. Evidentemente estos versos son anisosilábicos porque la sintaxis los impele a ello, o dicho de otra forma, porque la expresión no es perfecta. En el cómputo silábico se han tenido en cuenta numerosas sinalefas y el añadir una sílaba más a aquellos que fonéticamente estaban compuestos de siete (vv. 15, 23, 29, 43, etc.). La igualdad de fonemas a partir de la última vocal acentuada sólo alcanza a las vocales, y por tanto es rima asonantada, no siendo uniforme, sino variada, y que aparece en los versos pares. El verso octosílabo, con rima asonante en los pares, aparece en el continente de una de las estrofas que ya están presentes en los primeros vagidos de la literatura española: la copla:

"La jarchya hispanoebrea núm. 4 muestra en la disposición de sus cuatro octosílabos, con asonancia en los pares, la remota antigüedad de la cuarteta popular (...)" (11).

Tanto ésta, como el metro y la rima son de neto sabor popular, como corresponde al poema.

EL RAMO DE NAVIDAD y LA PASTORADA.

Dejando de momento el entronque de ambos textos con el teatro medieval, trataremos de establecer una teoría sobre la génesis de los textos. Concha Casado afirma taxativamente:

"Los tradicionales "Ramos de Nochebuena", que se cantaban en las iglesias de muchos de nuestros pueblos la noche del 24 de diciembre, son testimonio y reflejo de los autos de Navidad medievales" (12).

Estas afirmaciones se alínean con lo que Luis López Santos dice al analizar la estructura de las Pastoradas; en segundo lugar aparecen los ramos:

"2º. Villancicos narrativos- Forman un conjunto de romances y otras formas estróficas, en que los pastores cantan todo el asunto que después han de representar. (Aquí a veces se intercala la Misa de Noche Buena" ). (13).

Observamos aquí cómo la parte central del texto del ramo está presente, así como la intercalación de la misa que en el ramo también se lleva a cabo.

Más adelante Fernández Santos llega a la conclusión de que la escenificación de los pastores es posterior y añadido:

"Que todo ello es añadido y posterior se demuestra por la ilógica e ingenua superposición de lo que ya se ha narrado como sucedido" (14).

Esta dramatización tiene sus raíces en los elementos dramáticos presentes en los ramos y que la pastorada pondrá en escena. No olvidemos que el llevar el ramo, el cantar el texto, el ofrecimiento, la despedida, el diálogo de la Virgen y San José, son todos elementos de carácter representativo. Así, de aquí a la representación de la pastorada cabe sólo un paso.

En el polo opuesto se situarían las teorías de Maximiano Trapero que sostiene que la pastorada es la pervivencia del teatro medieval religioso, aunque como ha demostrado Lázaro Carreter en Castilla no existió dicho teatro medieval. Nos parece más acertada la opinión de Concha Casado de que los ramos son testimonio y reflejo del teatro medieval, pero no la pastorada pervivencia de ese teatro, ya que como se verá más adelante la pastorada tiene su origen en el ramo.

En oposición a López Santos se manifiesta José Luis Alonso Ponga al defender el carácter sustitutorio del ramo y por tanto considerar a éste y a la pastorada como independientes (15). Al contrario, habría que suponer que la pastorada ha sustituido al ramo y que en los lugares donde aún quedan los ramos es porque aquí aún no llegó la pastorada, que habría eliminado o absorbido al ramo.

Todo lo anteriormente expuesto se puede corroborar con el análisis de los textos de algunas pastoradas. En la de Castroponce (16), Quintanilla de los Oteros (17), Acevedo (18), entre otras, aparece en sus inicios el texto del ramo que desarrolla los temas que se dramatizarán con posterioridad. Además, la despedida del ramo se convierte en el elemento estructurador de las despedidas de algunas pastoradas, como las de Villamartín de Don Sancho (19) o la citada por López Santos (20).

Así pues, las pastoradas son textos posteriores a los ramos, pero en ningún caso de origen medieval. No tenemos texto alguno que lo corrobore, como corroboran la tradición medieval oral del romancero los numerosos pliegos del XVI o la presencia de los romances en los cancioneros del XV. Sólo cabría decir que son de origen tardío, probablemente del XIX.

CONCLUSIONES

En una enumeración sintética, las variadas conclusiones a las que se llega se podrían enumerar así:

1ª. El poema es de carácter tradicional.

2ª. La presencia de elementos cultos denotan la autoría de un clérigo en su creación originaria.

3ª Aunque el ámbito geográfico analizado sea pequeño, esta ceremonia y su texto deben estar extendidos a lo largo y ancho de la geografía española.

4º. Que es una muestra más del repertorio navideño.

5ª. Que el poema obedece a una estructura concéntrica.

6ª. Que tanto el narrador, los personajes, los tiempos verbales., como la métrica configuran en perfecta simbiosis un poema narrativo centrado en el tema de Navidad y en el ofrecimiento por la nueva buena del hecho trascendental de la religión católica, y todo ello vertido en el molde métrico de la copla.

7ª. Que el Ramo de Navidad es anterior a la Pastorada, ya que en éste están presentes todos los ingredientes que harán posible la posterior dramatización.

8ª. Que, aunque el poema tenga su origen en el medievo, el texto conservado es mucho más reciente.

Esperemos que el camino haya sido desbrozado y que los abrojos de lo desconocido no impidan determinar en sucesivos estudios los problemas e hipótesis aquí planteados.

____________

(1) ALONSO PONGA, José Luis; "Los Ramos de Alcuetas; Manifestaciones religiosas populares en la Comarca de los Oteros (León)", en Revista de Folklore, Valladolid, nº. 11, 1981, págs. 27-40.

(2) El nombre corresponde al sacerdote que regentaba en aquel momento la parroquia de Siero de la Reina (León).

(3) CASADO, Concha; "El Ramo de Nochebuena en tierras leonesas", en Revista de la Casa de León, Madrid, otoño-invierno, 1980, pág. 5.

(4) Cita tomada de Fernando LAZARO CARRETER: Teatro medieval. Edit. Castalia, Madrid, 1976, pág. 37.

(5) lbidem, págs. 39-40.

(6) CASADO, Concha, op. cit., pág. 5.

(7) Véase Ramón MENENDEZ PIDAL; "Poesía popular y poesía tradicional", en Estudios sobre el Romancero. Edit. Espasa-Calpe, Madrid, 1968, págs. 199-204.

(8) Véase SAN LUCAS: "Nacimiento de Jesús y visita de los pastores (2, 1-15)", en Biblia de Jerusalén. Edit. Desclée de Brouwar, Barcelona, 1971, págs. 199 y 1.367-1.368.

(9) Véase Alfonso I. SOTELO; "Introducción", en El Conde de Lucanor. Edit. Cátedra, Madrid, 1972, págs. 46-51.


(10) Con sentido de hombres de cultura, bien tonsurados o laicos.

(11) NAVARRO TOMAS, Tomás: Métrica Española. Edit. Guadarrama, Madrid, 1974, págs. 44-45.

(12) CASADO, Concha, op. cit., pág. 5.

(13) LOPEZ SANTOS, Luis: "Autos de Nacimiento Leoneses", en Archivos Leoneses, León, nº. 1, 1947, pág. 12.

(14) ibídem, pág. 23.

(15) ALONSO PONGA, José Luis, op. cit., pág. 27.

(16) DIAZ, Joaquín y ALONSO PONGA, José Luis: Autos de Navidad en León y Castilla Edit. Santiago García, León, 1983, págs. 76 y ss.

(17) lbídem, págs. 76 y ss.

(18) Pastorada inédita que pronto verá la luz en edición de Javier Fuente.

(19) ALONSO CORTES, Narciso: Villancicos " representaciones populares de Castilla. Edit. Institución Cultural Simancas, Valladolid, 1982, pág. 138.

(20) LOPEZ SANTOS, Luis, op. cit., pág. 24.




EL RAMO DE NOCHEBUENA
(Versión recogida en Siero de la Reina, zona noreste de León)

FUENTE FERNANDEZ, Francisco Javier

Publicado en el año 1986 en la Revista de Folklore número 61.

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