Intérpretes: Guitarra y voz: Joaquín Díaz
Clave: Agustín Serrano
Contrabajo: Carlos Casasnovas
Productor: Carlos Guitart
Técnico de sonido: Jean François Beaudet
Reedición:
Paseábase el rey moro por la ciudad de Granada,
desde la puerta de Elvira, hasta la de Vibarrambla.
Cartas le fueron venidas de que Alhama era ganada,
las cartas echó en el fuego, y al mensajero matara.
Descabalga de una mula y en un caballo cabalga;
por el Zacatín arriba, subido se había al Alhambra.
Desque en el Alhambra estuvo, al mismo punto mandara
que se toquen sus trompetas, sus añafiles de plata;
y que las cajas de guerra, apriesa toquen al arma
porque lo oigan los moros, los de la Vega y Granada.
Los moros que el son oyeron, que al sangriento Marte llama,
uno a uno y dos a dos, juntado se ha gran campaña.
Allí habló un moro viejo, de esta manera hablara:
<¿Para qué nos llamas rey
para qué es esta llamada?
una nueva desdichada
que cristianos de braveza
ya nos han ganado Alhama.>>
Allí hablo un alfaquí
de barba crecida y cana:
buen rey bien se te empleara.
Mataste los Bencerrajes,
que eran la flor de Granada.
Cogiste los Tornadizos
de Córdoba la nombrada.
Por eso mereces, Rey
una pena muy doblada.
Que te pierdas tú y el reino
y que se pierda Granada.>>