Estaba al pie de la cruz
la madre de gracia hermosa.
Afligida y dolorosa
viendo pendiente a Jesús.
Agudo y cruel puñal
hiere a la madre doliente
de tristezas un torrente
da a su pecho virginal.
La aflicción cuán grande fue
de nuestra madre bendita
cuán terrible fue su cuita
cómo triste no estaré.
Al ver al Hijo de Dios
sufriendo pena tan dura
fue muy grande su amargura
fue terrible su dolor.
Si algún hombre el gran pesar
de esta madre hubiera visto
al pie de la cruz de Cristo
qué hiciera sino llorar.
Quién podría no sentir
aquel dolor tan prolijo
cuánta pena con el Hijo
la madre debió sufrir.
Estaba al pie de la cruz
la madre de gracia hermosa.
Afligida y dolorosa
viendo pendiente a Jesús.