A finales del siglo XIX y principios del XX surge un enorme interés en la creación de cordófonos en general, y muchos de ellos alrededor de las citaras centroeuropeas. Así encontramos cítaras frotadas con arco, cítaras equipadas con un teclado, cítaras de acordes, autocítaras, etc.
El instrumento que nos ocupa podría pertenecer a la familia de las cítaras, pero habida cuenta de que su creador lo bautizó como “Reformed Ritter´s Guitar”, podemos deducir que tenía un cierto interés en acercarlo mas a la familia de la guitarra. El 30 de Julio de 1899 el luthier Paul Ritter presenta una solicitud de patente en EE.UU. que le será concedida el 14 de Noviembre de ese mismo año. Ritter era un considerado constructor que tenía su taller en la localidad alemana de Shöneck (Sajonia)
Lo cierto es que no disponemos de información sobre su datación exacta, pero como muchos de los inventos del XIX, su principio de utilidad es coherente y su constructor consiguió su objetivo. Se trataba de poder acceder, con poca dificultad técnica, el mayor numero de acordes posibles. Así incorpora seis acordes iniciales que se ven alterados merced a un firme sistema de palancas de fácil uso. El instrumento es de manejo sencillo, ligero y de buen sonido.
Una cita sobre este instrumento aparece en el libro “Musical Instruments of the World” editado por Paddington Press en 1976 y el "Technisches Museum" de Viena exhibe otro ejemplar idéntico en su sección de Instrumentos musicales
Este instrumento se exhibe en el Museo de la Música de Urueña, colección Luis Delgado.