Revista de Folklore

Fundación Joaquín Díaz

Si desea contactar con la Revista de Foklore puede hacerlo desde la sección de contacto de la Fundación Joaquín Díaz >

Búsqueda por: autor, título, año o número de revista *
* Es válido cualquier término del nombre/apellido del autor, del título del artículo y del número de revista o año.

LA CONFIANZA Y LA DESCONFIANZA EN EL REFRANERO

PANIZO RODRIGUEZ, Juliana

Publicado en el año 1996 en la Revista de Folklore número 184.

Esta visualización es solo del texto del artículo.
Puede descargarse el artículo completo en formato PDF desde la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.

Revista de Folklore número 184 en formato PDF >


Para Julio Casares el refrán es "una frase completa e independiente, que en sentido directo o alegórico y por lo general en forma sentenciosa y elíptica, expresa un pensamiento -hecho o experiencia, enseñanza, etc.- a manera de juicio, en el que se relacionan por lo menos dos ideas.

Ofrecemos, seguidamente, una serie de refranes relacionados con la confianza y la desconfianza, algunos han sido recopilados en el partido judicial de Medina de Rioseco (Valladolid) y otros proceden de las obras señaladas en la bibliografía.

LA CONFIANZA

El Diccionario de la Real Academia define la confianza como "la esperanza firme que se tiene de una persona o cosa".

Los refranes relacionados con la confianza ponen de manifiesto los siguientes aspectos:

• Aspectos positivos de la confianza: Ninguno nace sin confianza. Ninguno vive sin confianza.

• Personas en las que debemos confiar: Fía, fía, pero sólo Dios y en Santa María. Fía mucho, más no de muchos. Fiar en Dios, y en otro no. No de ojos que lloran, sino de manos que laboran. Sólo has de fiar del que comió contigo una fanega de sal.

• Personas en quienes no debemos confiar: Quien del traidor se fía, lo sentirá algún día. Quien en el mundo fía, camina sin guía. Quien fía de un amigo vil, testigo busca contra sí.

• Personas que son confiadas: No hay necio que no sea confiado. Queda para majadero quien se fía de ligero.

• Inconvenientes de la excesiva confianza: A muchos perderse vi, por mucho fiar de sí. A quien de otro se fía, válganle Dios y Santa María. Confianza sin tasa empobrece tu casa. En la confianza está el peligro. Más mueren de los confiados que de los recatados. Por la puerta de la confianza se cuela la mala crianza.

A muchos perderse vi, por mucho fiar de sí: Indica que no es conveniente la excesiva confianza.

Amistad con cuatro, junta del diablo si es de beatos: Refrán que indica la falsedad de las personas beatas.

Amistad, con todos; confianza con pocos.

Amistad, pero sin mucha familiaridad.

A quien de otro se fía válganle Dios y Santa María: Indica la poca confianza que debemos tener en otras personas.

A quien mal canta, bien le suena; porque si mal le sonara, no cantara: Refrán que pone de manifiesto la excesiva confianza que tienen algunas personas en sí mismas.

Bien mereció papilla quien se fió de mariquilla: Indica el aspecto positivo de la confianza en una persona determinada.

Confianza y vida, sólo una vez perdida.

Confianza sin tasa, empobrece tu casa: Refrán que pone de manifiesto lo perjudicial que es la confianza excesiva.

Creer con ligereza, gran torpeza: Refrán que indica que no debemos confiar con frecuencia.

De quien yo me fío, guárdeme, Dios mío; de quien no, me guardaré yo.

Engañado es siempre el que mucho de sí fía; ello es grande ventura topar buena guía.

En la confianza está el peligro: El exceso de buena fe nos conduce con frecuencia al daño.

En la mucha confianza, hay el peligro de la tardanza.

El confiado sale burlado, y el desprevenido queda lucido: Refrán que recomienda que se esté siempre sobre aviso.

El más avisado se ahoga en el vado: Refrán que pone de manifiesto el peligro de la excesiva confianza.

El que en sí con fía, yerra cada día.

Fía, fía; pero sólo en Dios y en Santa María: Indica que la confianza verdadera sólo debemos ponerla en Dios y en la Virgen.

¡Fíate de la Virgen y no corras!: Refrán que pretende condenar la confianza excesiva en los hombres.

Fía mucho, mas no de muchos.

Fiar en Dios, y en otro no: Refrán que pone de manifiesto la única persona en la que debemos confiar.

Fía en castañas asadas, y saltaros han a la cara: Significa que no debemos confiar en algunas personas.

Fiar es cobre, y no fiarse es oro: Pone de manifiesto que es mejor no fiarse que fiarse.

Fíate de la Virgen, pero corre: Indica que debemos fiarnos de las personas, pero con precaución.

La confianza en Dios y los pies en la calle: Significa que hay que confiar en Dios y obrar a la vez.

La confianza mata al hombre: Significa que no demos ser muy confiados.

La ignorancia es muy confiada.

La mucha confianza, o satisfacción, o conversación o familiaridad, es causa de menosprecio: Enseña que aun cuando a los inferiores se les debe tratar con benevolencia no debe exagerarse ésta hasta el punto de llegar a la familiaridad, pues acaban por tratarnos como si todos fuésemos iguales.

La mucha confianza -o conversación- es causa de menosprecio.

Maldito el hombre que fía en hombre: Indica que no debemos fiarnos solamente de los hombres.

Más es que loco quien fía lo mucho del que no es leal en lo poco.

Más mueres de los confiados que de los recatados.

Necio es quien vive persuadido de que su enemigo está dormido.

Necio es quien fía en la necedad de otro.

Ninguno nace sin confianza.

Ninguno vive sin confianza.

No hay necio que no sea confiado.

Ni tenemos mal incierto, ni confíes en bien cierto: Porque la suerte de ambos puede cambiar.

No se ha de dar a la dueña tanta mano como se toma de ella: Significa que no debemos dar a las personas demasiada confianza.

No de ojos que lloran, sino de manos que laboran: Significa que debemos confiar en las personas que trabajan.

Por la confianza nos entra el engaño: Refrán que pone de manifiesto que no debemos confiar excesivamente.

Por la puerta de la confianza se cuela la mala crianza: Significa que la confianza debe ser limitada.

Por ser confiado, me vino mal hado: Significa la mala suerte que produce la confianza.

Quien a su enemigo cree, su pago le viene: Significa que no debe ponerse la confianza en el amigo porque éste falla.

Queda para majadero quien se fía de ligero.

Quien de otro se fía, ya llorará algún día: Porque la otra persona le fallará.

Quien del traidor se fía, lo sentirá algún día.

Quien en el mundo fía, camina sin guía: Significa que no debemos fiarnos con ligereza.

Quien mete amigo en su casa, su propia ruina traza: Porque su amigo le fallará.

Quien se fía de amigo vil, testigo busca contra sí.

Quien se fía de un lobo, entre sus dientes muere.

Quien mucho en sí confía, perdido cualquier día.

Quien lleve amigos a su casa, no se queje si mal lo pasa.

Si no hubiera perros no habría lobos.

Sólo has de fiar del que comió contigo una fanega de sal.

Tratara todos con bondad, pero no con familiaridad.

Tratar con tus amigos en la plaza y no los lleves a tu casa.

LA DESCONFIANZA

El Diccionario de la Real Academia define la desconfianza como "la falta de confianza".

Las paremias alusivas a la desconfianza ponen de manifiesto los siguientes aspectos:

• Conveniencia de la desconfianza: Ni fiar, ni confiar, ni porfiar, si bien te has de guardar. Si no quieres ser engañado no seas confiado. Al que no se fió, nadie le engañó. Ni fía, ni porfía, ni entres en cofradía. No te fíes de ligero; que es falso el más verdadero.

• Personas que inspiran mayor desconfianza: A canto de pájaro y gracia de niño no convides a tus amigos. Quien tiene amigo dudoso, duerma con un ojo y vele con el otro. En nuevo amigo y en casa vieja no pongas tu confianza. De quien no has tratado no jures de que es hombre honrado. No te fíes de villano ni bebas agua de charco.

• Necesidad de ver para confiar: Santo Tomás, para creer, ver y tocar. Tanto creo, cuanto veo. Lo que los ojos no ven, los oídos no lo creen.

• Personas más desconfiadas: Quien más sabe, menos confía. Quien del mundo sabe, aparenta fiarse de todos, pero a sus puertas echa las llaves.

Necios y gatos son desconfiados.

A canto de pájaro y gracia de niño no convides a tus amigos: Porque ambos suelen fallar.

A cordero extraño no agasajes en tu rebaño: Porque beneficiamos a las personas extrañas y suelen fallarnos.

A Fray soy poca fe le doy; y de Fray fue menos me fié: Indica que debemos desconfiar.

A gran oferta, gran pensamiento, y a mucha cortesía mayor cuidado: Indica que debemos desconfiar de las apariencias.

Al entrar en tratos encomiéndate a San Segurado: Indica lo difícil que es fiarse de otros en el trato.

Al hombre barbirrojo y al perro rabicorto no los pierdas de ojo: Significa la desconfianza que debemos tener ante ellos.

Al hombre desgarbado, dale de lado: Refrán que pone de manifiesto la indiferencia de algunas personas.

Al hombre y al fuego con recelo: Significa la poca confianza que se debe tener en ambos.

Al molino y a la plaza, el amo de la casa: Se sobreentiende tiene que ir.

Al que mal hicieres, nunca le creas: Pone de manifiesto que no debemos confiar en algunas personas porque son vengativas.

Al que nunca bebe vino no le fíes ni un comino.

Amigos de muchos años dan los desengaños: Indica que no debemos fiarnos de los antiguos amigos, porque a veces nos fallan.

Amistad rehecha, siempre vive en sospecha.

Antes prenda que fiador.

A quien ha de dar, no le faltan cien ojos, y a quien ha de recibir, le bastan dos: Pone de manifiesto la desconfianza de algunas personas.

A quien no es de fiar ni un saco de alacranes le des a guardar: Indica la desconfianza que debemos tener en dichas personas.

A otro perro con ese hueso; que yo roído le tengo: Refrán que indica que no debemos confiar en una persona que ya conocemos sus defectos.

Aun por lo que tus ojos veas, no todo lo creas: Refrán que invita a la desconfianza.

Aunque pinte santos el diablo han de ser malos: Indica que no debemos confiar en las personas de malos sentimientos.

A veces el flaco derriba al fuerte: Pone de manifiesto la desconfianza que debemos tener ante algunas personas.

Bajo su sola fe, a nadie creeré: Porque son necesarias las obras.

Bien lo dijo Jeremías: "Maldito el hombre que del hombre se fía": Porque el hombre puede fallar.

Bueno es, bueno es, con quien tras el hogar no estés: Significa irónicamente, que no debemos confiar en las personas que no conocemos.

Bueno es fiar en el buen amigo; pero tu dinero, contigo: Invita a desconfiar de los buenos amigos en cuestiones económicas.

Bueno es fulano, hasta ver lo contrario: Refrán que pone de manifiesto la desconfianza de algunas personas.

Caras vemos; corazones no conocemos: Refrán que indica, a veces, que las apariencias engañan.

Con amigos del plato, poco o ningún trato: Pone de manifiesto que con las personas con las cuales sólo te unes para comer no debes tener confianza.

Con tu amigo y con tu enemigo, tu dinero en el bolsillo.

Creerse de ligero es peligroso y por demás dañoso.

Cree tan sólo lo que vieres, y no todas veces: Refrán que pone de manifiesto que no se puede creer en todo lo que se ve, porque las apariencias engañan.

Cuando la rana tenga pelo, seréis vos bueno: Refrán que pone de manifiesto la desconfianza de una persona.

Cumple abrir el ojo, y andar alerta: Refrán que invita a la desconfianza.

Cumple con todos, y fía de tí solo.

De hombre mal barbado y de viento huracanado: Indica que debemos desconfiar de ellos.

De hombre desgarbado, guárdate como del diablo: Indica la poca confianza que debemos tener en tales personas.

De hombre sin un vicio, no me fío.

De la mala te guardas, de la buena no fíes nada: Indica la desconfianza que debemos tener en las personas que parecen buenas.

Del bueno no fiar y al malo no echar: Pone de manifiesto la posición que debemos tener ante tales personas.

Del malo no se espera buena obra: Refrán que indica la desconfianza que debemos tener en tales personas.

De lo que no veas, ni la mitad creas.

Del que jura tiene la impostura: Indica que de las personas que juran no debemos fiarnos.

Del que yo me fío me guarde Dios; que del que no me fío me guardo yo.

Del que se alaba de decir al Rey compadre, no fíe nadie.

De los buenos, buena prenda; de los malos ni aun fiador: Indica en quien debemos desconfiar.

De quien algo te vendió, no fíes lo que te quedó: Refrán que invita a la desconfianza.

De quien no has tratado, no jures de que es hombre honrado: Indica la poca confianza que debemos tener en las personas, con quienes no hemos convivido.

Del santo me espanto, del pillo no tanto: Indica que debemos desconfiar de las personas que aparentan bondad.

De persona palabrera nunca te creas: Indica la desconfianza que debemos tener en las personas que hablan demasiado.

De quien pide desconfía; a quien das no te dará.

Desconfianza, aseguranza: Refrán que pone de manifiesto que los desconfiados triunfan siempre.

Despacio has de mirar de quien te puedes fiar.

De tal lugar, ni espero coger, ni quiero sembrar: Significa la desconfianza de una persona.

De tu dinero no hagas a nadie cajero: Significa que no es conveniente confiar.

Dios me guarde del hombre de bien; que del malo yo me guardaré: Pone de manifiesto en quién debemos confiar.

El desconfiado sale burlado, y el prevenido lucido.

El día de hoy no hay de quién fiar.

El hombre receloso, lo cierto lo hace dudoso: Indica la desconfianza de algunas personas.

El malo siempre piensa engaño.

En amistad de señor, sol de invierno y palabra de mujer, confianza no debes poner: Porque todos suelen fallar.

En cojera de perro, y lágrimas de mujer no hay que creer.

En confianza de las gentes no des lo tuyo a tus parientes: Refrán que invita a la desconfianza en los parientes.

En el bosque hay un pájaro que dice: "No te fíes".

En nuevo amigo y en vieja casa no pongas tu confianza: Porque ambos suelen fallar.

En quien fe no me guardó, no pondré la mía yo: Significa que debemos desconfiar en quien no se fía de nosotros.

En sudor de caballo, juramento de hombre y llanto de mujer, no hay que creer: Refrán que indica la desconfianza que debemos tener ante los citados acontecimientos.

Entre amigos, con verlo basta: Significa que aun entre amigos es necesario ver para confiar.

Entre amigos, viejo o mozo, abre los ojos: Pone de manifiesto la desconfianza que debemos tener ante esas personas.

Entre buenos no hay cuenta; quien más pone más pierde: Refrán que invita a la desconfianza.

Entre dos amigos, un notario y dos testigos: Significa que debemos desconfiar incluso de los amigos.

Entre amigos, un notario y dos testigos; y entre hermanos, cuatro testigos y dos notarios: Significa que no debemos fiarnos ni de los amigos ni de los hermanos.

Ese es bueno, quien no está a tu fuego: Indica que debemos confiar en las personas que no se alegran de nuestro mal.

Extremo es creer a todos y yerro no creer a ninguno: Indica que no se debe desconfiar de todos.

Fe en Dios, y en los hombres no: Indica la desconfianza que debemos tener en los demás.

Fía de todas cosas poco; que fiar mucho es de loco.

Fía en tu duro, más que en amigo ninguno: Indica que debemos fiarnos más en el dinero que tenemos que en los amigos.

Fiar, en Dios; prestar paciencia, y dar los buenos días, y ésto, a quien lo merezca: Refrán que pone de manifiesto la necesidad de no confiar en todas las personas.

Fiarse es cobre y no fiarse es oro: Refrán que pone de manifiesto la necesidad de la desconfianza.

Fía, mas no mucho, ni de muchos.

Fiar no del todo en el hombre honrado, y nada en el bellaco: Indica en quién debemos desconfiar.

Fía sólo en dos: en ti y en Dios; y si con más respeto lo he de decir, en Dios y en ti: Refrán que invita a la desconfianza.

Guarda, moza, de promesa de hombre que como cangrejo corre: Indica la desconfianza que debemos tener en esa clase de personas.

Hombre avisado, no fía de lo hablado, sino de lo mostrado.

Hombre que tiene canas no cree en solas palabras: Las personas mayores necesitan de las obras para creer.

La cerradura de puerta no es para el enemigo, sino para el amigo: Significa que a veces los amigos nos fallan.

La desconfianza aparta el engaño: La mejor manera que tenemos de evitar que se burlen de nosotros es la de no confiar en nadie.

La desconfianza es madre de la seguridad.

La duda ofende.

La vista hace fe, y no "de oídas lo sé": Indica la necesidad de ver para creer.

Lo que me cuentan no creo, sino lo que veo: Refrán que indica la poca confianza de algunas personas.

Lo que no entre por tu ojo o por tu oído, no sea de ti creído.

Lo que veo, bien lo creo.

Lo que los ojos no ven, los oídos no lo creen: Indica la necesidad de ver para confiar.

Los amigos reconciliados, quedan recelosos y desconfiados.

Maldito el hombre que fía en hombre: Indica que no debemos confiar en los hombres.

Más fe hacen los ojos que las orejas: Pone de manifiesto que se confía más en lo que se ve que en lo que se oye.

Más vale ver que creer.

Mendo, tú me engañas y yo te entiendo.

Mira bien de quién te fías; que hay en el mundo mucha falsía: Refrán que indica la abundancia de la falsedad en el mundo.

Mira bien lo que haces y no te fíes de rapaces: Indica la desconfianza que debemos tener en los niños.

Muy bueno será; muy bueno; pero echa la llave a tu granero.

Nada creas sino que lo que veas.

Necedad es dar más fe a palabras que a obras: Refrán que pone de manifiesto la prioridad de las obras sobre las palabras.

Necios y gatos son desconfiados.

Ni a nadie fíes, ni de nadie te confíes: Refrán que invita a la desconfianza.

Ni creas de mercadel, ni de pobre de fardel: Indica en quiénes debemos desconfiar.

Ni del cielo estrellado, ni de rabo tan alzado, no son buenos fiadores: Significa que no debemos confiar en ambos acontecimientos.

Ni de cojera de perro, ni del buen sol de febrero: Indica que no debemos fiarnos de ambos.

Ni de flores en marzo, ni de la mujer sin empacho: Significa que no debemos fiarnos de ambas.

Ni del mozo fiar ni del viejo esperar: Significa que debemos desconfiar de ambas personas.

Ni el pie en la losa ni creas en hermosa: Pone de manifiesto la desconfianza que debemos tener en ambos.

Ni de gracia de niño ni de cantar de pajarito: Indica que no debemos fiarnos de ambos.

Ni en mar tratar ni a muchos fiar.

Ni espero ni creo más de lo que veo.

Ni fía, ni porfía, ni entres en cofradía: Refrán que pone de manifiesto la desconfianza en esas tres acciones.

Ni fiar, ni confiar, ni porfiar, si bien te has de guardar: Refrán que indica la conveniencia de la desconfianza.

NI fiar, ni porfiar.

Ni fíes, ni confíes, ni prestes, ni des, y te saldrá la cuenta al fin de mes: Refrán que invita a la desconfianza.

Ni fíes, ni porfíes, ni confíes, ni arriendes, vivirás entre las gentes.

Ni fíes, ni porfíes, ni arriendes, y vivirás como quisieres.

Ni fíes, ni confíes, ni prestes, vivirás como quisieres.

Ni fíes, ni porfíes, ni entres a poner paz, y a tu placer vivirás.

Ni para mozo hay mal cocinero, ni para viejo fiel despensero: Indica la desconfianza de ambas personas.

No apruebes hasta que pruebes.

No creas al de la feria que viene, sino al que de ella vuelve: Porque el que dice que viene, quizá no haya ido.

No creas en el santo si no vieres el milagro: Pone de manifiesto la necesidad de ver las obras de una persona para confiar en ella.

No creas sino lo que claramente veas; que hasta en lo que se ve claro, cabe engaño.

No fíes y no serás engañado.

No hay necio que no sea desconfiado.

No hay que fiar de quien no se fía.

No me echaréis treta falsa: Refrán que pone de manifiesto la desconfianza.

No te fíes de burra que trota: Refrán que invita a la desconfianza.

No te fíes de la cara; que hasta el padre al hijo engaña: Significa que no debemos fiarnos de las apariencias.

No te fíes del hombre que siempre sonríe.

No te fíes de quien en tí desconfíe.

No te fíes de ligero; que es falso el más verdadero: Significa que las apariencias engañan.

No te fíes de ligero, y no serás engañado.

No fíes de perro que cojea, ni de mujer que lloriquea.

No te fíes del enemigo que duerme.

No te fíes de niebla, ni de promesa de suegra: Porque ambas suelen fallar.

No te fíes de villano ni bebas agua de charco.

No te fíes, ni fíes, ni confíes, ni porfíes, ni hijos ajenos críes: Porque las mencionadas acciones suelen perjudicar a la persona que las realiza.

No te has de fiar, si no te han de engañar: Refrán que invita a la desconfianza.

No seáis fiel a quien piensa que sois ladrón.

No son palabras para mi tía, que aun de las obras no fía.

No son todos ruiseñores los que andan entre las flores: Indica que no debemos fiarnos de lo que vemos.

Ojo que no ve, hombre que no cree: Pone de manifiesto la necesidad de ver una cosa para creer en ella.

Oir a todos, creer a pocos.

Para bien creer, no hay cosa como ver: Indica que para confiar en algo hay que verlo antes.

Pues es otro día os mostraré.

Quien a nadie quiere no merece fe: Por el término fe se entiende confianza.

Quien da lo que tiene antes de la muerte, merece que le den con un canto en los dientes: Indica que no debemos confiar en los demás.

Quien da pan a perro ajeno, pierde pan y pierde perro: Refrán que invita a la desconfianza en las personas desconocidas a las que favorecemos.

Quien del mundo sabe, aparenta fiarse de todos; pero a sus puertas echa la llave.

Quien jurando miente, poco a su alma quiere.

Quien más sabe menos cree.

Quien mucho desconfía, no entra en la casa mía.

Quien más sabe, menos fía: Las personas inteligentes confían poco en los demás porque se dan cuenta de la fragilidad humana.

Quien no confía, no desconfía.

Quien no cree a buena madre, crea a mala madrastra.

Quien no es bueno para sí, ¿cómo lo será para mí?: Significa que debemos desconfiar en tales personas.

Quien no te conoce te compre: Indica la desconfianza en una persona.

Quien obra sin recelos, errará sus hechos.

Quien quiera huir de cuidados, tenga los ojos y oídos abiertos y los labios cerrados: Refrán que pone de manifiesto que es mejor callar y observar,

Quien tiene un amigo dudoso, duerma con un ojo y vele con el otro: Indica la desconfianza que debemos tener ante esa clase de personas.

Quien una vez hurta, fiel nunca: Pone de manifiesto que no debemos fiarnos de las personas que roban.

Santo Tomé, ver y creer; y de aquello que veas, la mitad no creas.

Santo Tomás, para creer, ver y tocar: Indica la necesidad de la observación para confiar.

Si paz quieres gozar, ni fiar, ni porfiar, ni confiar: refrán que indica las condiciones necesarias para disfrutar de paz.

Si engañado no has de ser, no creas sin ver.

Si no quieres ser engañado no seas confiado.

Si no te han de engañar, no te has de fiar: Refrán que recomienda la desconfianza.

Si no veo lo que hago, llámome a engaño.

Si quieres que yo te cante la paga por delante: Refrán que pone de manifiesto la desconfianza de algunas personas.

Si te parece inocente, coge tu capa y vente: Indica que a veces las apariencias engañan.

Sólo creo lo que veo, y no todo Mateo.

Tanto creo cuanto veo.

Trata con escama y tino a los que no beben vino: Refrán que indica que a veces las apariencias engañan.

Te puedes arruinar por porfiar y por fiar: Refrán que invita a la desconfianza.

Todos somos personas respetables; pero cada cual eche y guarde su llave.

Tú habla, a todo el mundo; tu dinero a ninguno: Significa que no debemos confiar nuestro dinero a nadie.

Una fanega de sal ha de comer un hombre con su amigo antes de fiarse de él: Significa que es necesario tratar mucho a una persona, antes de fiarse de ella.

Va tu enemigo a ti humillado, guárdate de el como del diablo: Indica la desconfianza que debemos tener ante el enemigo.

Vé con él, y guárdate de él: Refrán que invita a desconfiar en una persona.

Ver para creer, y no toda vez.

Ver y creer como Santo Tomé: Refrán que pone de manifiesto la necesidad de ver para confiar.

Vive con tu amigo como con tu mayor enemigo: Indica que no debemos fiarnos excesivamente de los amigos.

____________

BIBLIOGRAFÍA

CASARES, J.: Introducción a la Lexicografía moderna. Madrid, 1969.

MARTÍNEZ KLEISER, L: Refranero general ideológico español.

REAL ACADEMIA ESPAÑOLA: Diccionario de la Lengua Española. 2ª Ed. Madrid, 1992.

SBARBI, J. Mª: Diccionario de refranes. Buenos Aires, 1943.



Esta visualización es solo del texto del artículo.
Puede descargarse el artículo completo en formato PDF.

Revista de Folklore número 184 en formato PDF >


LA CONFIANZA Y LA DESCONFIANZA EN EL REFRANERO

PANIZO RODRIGUEZ, Juliana

Publicado en el año 1996 en la Revista de Folklore número 184.

Revista de Folklore

Fundación Joaquín Díaz